#AquiToSeVeBonito
Todos sabemos que el cambio es una constante, algo que nos persigue a todos y que artísticamente anda dando lecciones. Lecciones de vida que necesitamos para conquistar un yo superior. ¿Pero qué pasa si nos resistimos? ¿Si le hacemos trampa y queremos quedarnos frizados en nuestra zona de Confort?
El cambio es una manifestación astuta y paciente, no se desespera y sabe identificar sus presas rebeldes y las adaptables. El no para y sigue hasta dar con su propósito. Hay varias formas de manifestar el cambio… cuando cambiamos nosotros o cuando cambia nuestro entorno y ahí debemos ser responsable con lo que nos toca.
Cuando cambiamos estamos dejando el viejo ser para emprender un nuevo camino y ahí podemos perder personas, cambiar hábitos, conocer cosas de nosotros que ni siquiera pensábamos posibles. Podemos entender que hay etapas de nuestras vidas que se van y crecer nos va a doler, pero nos hará mucho más aptos para los acontecimientos que vendrán constantemente. A la vez, cuando nuestro entorno cambia debemos adaptarnos y desarrollar esa capacidad de encender el lado camaleónico que nos puede ayudar a sobrevivir a esa ola que no estábamos esperando.
La resistencia nos llena de angustia y comenzamos a buscar razones inútiles de porque nos pasa esto o lo otro. Ignorando inconsciente o conscientemente en muchos casos,
que cada cosa trae algo nuevo. Habrá acontecimientos difíciles, duros de enfrentar, pero tu madera interna la desarrollas tú.
En mi opinión, la capacidad de adaptación es una de las habilidades humanas que nos acerca más a la plenitud, nos prepara para lo que venga con actitud guerrera y envuelta en fuerza. Es más que solo cambio, es evolución.
Hay una gran frase que me ha impactado: “Cambia antes que tengas que hacerlo.” – Jack Welch, que gran verdad. No hay que esperar para analizar que podemos mejorar, en que podemos invertir nuestro tiempo para llegar a ser mejores. Nos enfocamos tanto en querer cambiar el mundo y nos olvidamos de cambiarnos nosotros… así le aportamos mucho al mundo.
El verdadero poder, el que nos hace maravilloso es poder cambiarnos y reinventarnos con una actitud elegante y positiva. El poder de ser, ese nos llevará lejos.