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7 de mayo 2024
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OpiniónPerla Rodríguez M.Perla Rodríguez M.

La tercera ola

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Y Dios creó al hombre a su imagen; lo creó a imagen de Dios, los creó varón y mujer. Génesis Capt.I vers.27

Este es el primer relato de la historia en donde se define la aparición de la mujer, identificada por su sexo y creada a imagen y semejanza de Dios a igual que el hombre. Dios definió biológicamente los sexos de todas las especies, y le dijo a su creación: “Sean fecundos, multiplíquense, llenen la tierra y sométanla”, dando el mismo rango de poder a ambos para señorear la tierra. Queda definido aquí por vez primera el sexo y la equidad en los roles.

Es importante destacar que en este relato Dios no le indica a ninguno de los sexos que ellos pueden elegir ser intercambiados o que pueden elegir no tener sexo, él ya los diferenció biológicamente hablando. Por su parte la ciencia de la biología ha definido a la mujer y al hombre por su sexo: ¿Qué es el sexo? En términos biológicos el sexo es la condición orgánica que distingue a machos de hembras, estipula el Diccionario de la Real Academia Española.

La mujer biológicamente hablando es aquella que ha nacido con los órganos internos femeninos, dotados de ovarios que le permiten producir óvulos y cuyos procesos hormonales ocurren mensualmente posibilitando gestar y por ende procrear un nuevo ser humano; en cambio el hombre cuyos órganos sexuales son externos, poseen testículos en los cuales se producen espermatozoides. Por tanto, biológicamente usted nunca deja de ser del género femenino o del género masculino.

Por otra parte, existe otros seres humanos que padecen de disforia de género o incongruencia de género, que no es más que la no identificación o alineación psicológica con la identidad de género que poseen, este es el caso de los transgéneros o de género diverso y los que se auto denominan de género no binario, que son los seres humanos que no se identifican con ninguno de los dos.

En España, la Ministra de la Igualdad, Irene Montero Gil, ha promovido dentro del marco de la reforma de la ley del aborto, aprobar una la licencia temporal remunerada en caso de menstruaciones dolorosas, en dicho texto la Ministra hace un llamado al uso de la neolenguaje progre en el se nos denominará “ Personas Menstruantes” en vez de “Mujer” a fin de integrar a la comunidad de mujeres genderqueer (Identidad diversa o binaria)y transgénero (mujer que se ha cambiado su identidad al género masculino), para que esta comunidad se sienta identificada e incluida, en este mismo tenor, esta nueva ideología de género se ha seguido en Chile en su proyecto legal que actualmente se encuentra en discusión por el cambio que sugiere de mujer a personas menstruantes.

Estos proyectos han generado una gran discusión en sus respectivos países y a la vez controversia mundial, toda vez, que se cambia la palabra mujer a personas menstruantes, es esta una discusión divorciada realidad legal, sin embargo no la debemos pasar por alto puesto que no vivimos en un mundo aislado sino mas bien conectado y marchamos con la vanguardia.

La Ministra de la Igualdad de España, Irene Montero Gil, ha dicho que “el sexo es aquel que se elige no el que llevamos al nacer”, esta ideología de género es la llamada “Tercera ola” y es aquí donde me detengo y pienso que como feminista todo tiene su limite y que debemos ser más críticas a la hora de aceptar o celebrar ideologías que pueden afectar nuestro género.

Si bien, en la República Dominicana aún luchamos por inculcar un pensamiento progresista en nuestra sociedad con el que perseguimos hacer respetar las ideologías feministas de la segunda ola y si bien aún existe una población femenina que ignora sus derechos y en ese mismo tenor formada para ser sumisa en un contexto social donde predomina el patriarcado y donde todavía tenemos muchos temas pendientes, tales como la regulación de tres causales que permitan legalizar el aborto dentro del marco legal penal, en un país donde todavía existe una gran discriminación en temas laborales y donde existe un gran machismo en cuanto al tema de la equidad en los roles, no podemos ignorar la marcha de la ideología que destierra la denominación de “ MUJER” en proyectos legales extranjeros, donde se establecen derechos a las mismas, en dos países de tradición legal importante .

Por tales, motivos expuestos me he de sorprender que una conocida abogada dominicana exponga que estas discusiones son bizantinas como forma de desviar la atención que merece este tema y palidece mi admiración hacia ella.

De manera que he de agregar que el feminismo de tercera ola quiere negarnos la condición humana de ser denominadas mujeres para darle cabida una minoría que es apática a su género: ¿Por qué debe la mujer desplazar su denominación como tal en una ley que la protege y la defiende para hacer incluir personas que reniegan su condición biológica?

En la República Dominicana hay un fuerte movimiento LGTBQ+, que al igual que en otros países y a nivel mundial, busca ser escuchado, el cual percibimos está usando al feminismo para hacerse escuchar, lo cual no se me hace ni justo ni necesario. En verdad no existe de mi parte ningún tipo de prejuicio hacia está comunidad, pero no puedo permitir excluirme de esta discusión foránea pero no tan lejana a nuestra realidad, como ciudadana mujer del mundo.

Entiendo, que la agenda mundial programada por las grandes organizaciones LGTBQ+, está orillando a la sociedad a una manipulación insistente de valores y principios inadecuados ubicando dentro de la normalidad los mismos, sin con esto querer generar una controversia que pueda discriminarlos, entiendo que han osado de cruzar una línea muy sensible donde se trasgrede nuestra identidad de género feminino, toda vez que busca dejar sin efecto la denominación de MUJER como tal dentro del contexto legal de una norma. Con la aceptación de esta nueva ideología de género se deja por fuera los esfuerzos de nuestras antecesoras en la lucha por abrir el camino de las mujeres.

Si bien estas ideologías son ex foráneas a nuestros sistema legal, las ideologías viajan y viajan rápido, así como, el socialismo nació en Rusia y se propagó a Cuba y más adelante se instaló en Venezuela, así la ideología de género viaja desde el continente Europeo a Latinoamérica y empieza en Chile, usando el eslogan “Ser mujer no está definido por el sexo con el que se nace”, invitando a una desorganización social en la que se trasgrede cualquier tipo de condición biológica, en la que estamos más que claros solo existen dos posibilidades: Nacer mujer o nacer hombre, no se hace usted mujer ni se hace usted hombre luego de nacer, la biología humana no es mutable. Es importante, destacar que la negación de este gentilicio para darle espacio a una comunidad que se rechaza así misma es tirar a la basura los años de lucha de las mujeres que nos han labrado el camino a nivel universal para que hoy la palabra MUJER tenga un espacio en la historia.

No apoyo, pues, el deseo de esta comunidad de arrastrarnos a un limbo legal donde no esté definido nuestro sexo y se nos quiera exonerar de nuestra nominación de mujer. Ser mujer es nacer mujer pues se es mujer desde el nacimiento no se hace una en el transcurso del tiempo.

Por Perla Rodríguez

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