Las próximas votaciones del Colegio Dominicano de Notarios se llevarán a efecto el sábado 27 de este mes de octubre, donde será elegido el nuevo Consejo Directivo para el periodo 2019-2021.
Estas no son unas elecciones rutinarias, en ellas está en juego no solo la institucionalidad del Colegio sino la misma actividad notarial y hasta la seguridad jurídica que esta debe proporcionar.
¿Por qué digo esto? La actividad notarial se está desarrollando en una atmósfera negativa de muy alto impacto, capaz de afectar significativamente el valor del ejercicio notarial, creando incluso una actitud de acusación por parte de la opinión pública.
Desde la entrada en vigencia de la ley 140-15 del notariado, la Suprema Corte de Justicia está enfrentada al Colegio Dominicano de Notarios pues se opone a la aplicación de la referida ley alegando que en la misma se aprecia ¨una situación de marcada contrariedad, particularmente, por el régimen de cobro de los honorarios y la nuevas funciones que ejercen los notarios en sustitución de los alguaciles¨. Se opone también al uso obligatorio del papel de seguridad notarial.
Nuestro propósito no es analizar las posiciones encontradas, sino advertir que de no iniciarse un proceso de dialogo que culmine en un acuerdo que contribuya a la solución del conflicto, el valor del ejercicio notarial seguirá siendo afectado, creando más incertidumbre y falta de confianza entre los notarios y la sociedad.
La falta de un acuerdo traerá como consecuencia una solución política de parte de los legisladores, que no necesariamente será la más conveniente al ejercicio notarial.
La actual directiva ha abandonado el diálogo.
La Suprema Corte de Justicia no es una entidad ajena al ejercicio notarial. Por el contrario es una autoridad, al igual que el Colegio Dominicano de Notarios para hacer cumplir la ley 140-15 del notariado según el artículo 15 de la misma ley. La Suprema Corte de Justicia es además quien nombra los notarios.
Como vemos estamos en un grave conflicto entre las autoridades del notariado.
He depositado mi confianza en el Doctor Nelson Rudys Castillo Ogando que es un experimentado gremialista y actual vicepresidente del C.D.N., siendo también candidato a la presidencia del Colegio Dominicano de Notarios, pues mantiene la posición de que dialogando, principalmente, con la Suprema Corte de Justicia se podría poner fin a la crisis.
Por otro lado y no menos importante es que, según lo establecido tanto en la ley derogada número 89-05 como en los artículos 10 de la ley número 140-15 y el 12 del Estatuto del Colegio de Notarios, se impide la reelección del actual presidente Doctor Pedro Rodríguez Montero, pues todas son imperativas al decir que ¨podrá ser reelegido únicamente en el periodo subsiguiente al que corresponde, no pudiendo postularse a una segunda reelección¨.
Como vemos solo se permite una reelección, la cual fue agotada por el Doctor Rodríguez Montero en el año 2016.
En caso de irrespetarse la ley y mantenerse la reelección, el Consejo Directivo al tener un origen ilegítimo, ya que se constituiría violando las leyes, caería en un caos institucional y sus acciones carecerían de legalidad y de legitimidad afectando la fe pública del gremio.
Por Tommy Mejía Pou