MI PALESTRA.
Hay que entender la preocupación que ha desatado la insensatez y la vocación mentirosa de una oposición sometida al escrutinio público nacional e internacional por sus malos hechos, ante la obra de gobierno del presidente Luis Abinader.
No hay un lugar por lejano que sea donde no esté la mano del gobierno en diversas formas y en beneficio siempre de los menos favorecidos.
Desde entuertos legales a hechos de mala fe hasta un gobierno sin un centavo ni para pagar los sueldos en medio de una pandemia que cerró el país y el mundo recibió en agosto del 2020 Abinader.
El país de hoy 5 años después es diferente, y es moralmente otro, no hay hermanos, ni cuñados, ni amigos del presidente, ni comité político vendiéndole al estado, ni una familia casi entera en las nóminas públicas.
Hay un presidente que ha sacrificado su familia y sus bienes para servirle al país.
Entiendo que el gobierno preocupe, la oposición está de manicomio, me imagino si el presidente no hubiera blindado la constitución.
De paso no tengo ni siquiera publicidad del gobierno.
Por Germán Martínez
