Al 30 de abril del 2023, el saldo de la deuda externa e interna del sector público no financiero, de RD, totalizó US$54,721.2 millones, representando el 44.7% del Producto Interno Bruto (PIB). Debemos mucho dinero.
El Banco Mundial es una institución subordinada a la ONU, creada en Breton Woods en 1944, conformado por 189 países miembros, con personal de más de 170 países, y oficinas en más de 130 lugares, el Banco Mundial es una asociación mundial única: Las cinco instituciones que lo integran, trabajan para reducir la pobreza en el mundo y generar prosperidad compartida en los países en desarrollo.
El Banco Mundial trabaja con los países en desarrollo con el fin de reducir la pobreza y aumentar la prosperidad compartida. El Banco Mundial proporciona financiamiento, asesoramiento en materia de políticas y asistencia técnica a los Gobiernos, y también se centra en el fortalecimiento del sector privado de los países en desarrollo.
El Banco Mundial es una de las principales fuentes internacionales de financiamiento y conocimientos para los países en desarrollo. Las cinco instituciones que lo integran, las cuales son: El Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), la Asociación Internacional de Fomento (AIF); la Corporación Financiera Internacional (IFC), el Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (MIGA) y el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), tienen el compromiso común de reducir la pobreza, aumentar la prosperidad compartida y promover el desarrollo sostenible.
El Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF) y la Asociación Internacional de Fomento (AIF) constituyen el Banco Mundial que proporciona financiamientos y presta asesoramiento en materia de políticas y asistencia técnica a los Gobiernos de los países en desarrollo.
La AIF centra sus actividades en los países más pobres del mundo, en tanto que el BIRF presta asistencia a los países de ingreso mediano y a los países pobres que tienen capacidad crediticia.
La Corporación Financiera Internacional (IFC), el Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (MIGA) y el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) centran sus actividades en el fortalecimiento del sector privado de los países en desarrollo.
A través de estas instituciones, el Banco Mundial proporciona financiamiento, asistencia técnica, seguro contra riesgos políticos y solución de diferencias a las empresas privadas, incluidas instituciones financieras.
Los países en desarrollo enfrentamos un conjunto de desafíos. La deuda es más cara, lo que subraya la importancia de tener políticas fiscales prudentes.
En el caso de la RD, el Banco Mundial recientemente, ha discutido con las autoridades sobre la desafiante situación mundial, incluyendo la difícil normalización de los tipos de interés tanto en Estados Unidos como en Europa y los elevados precios de los alimentos, la energía y los fertilizantes.
Sin embargo, no se vislumbra ayuda alguna del BM para desactivar, romper, eliminar y desaparecer los monopolios y oligopolios que aprietan la economía popular de RD, en el sentido de que nos obligan a comprar todo caro, donde la competitividad es inexistente y los grupos económicos se ponen todos de acuerdo en fijar los precios a su antojo, con el fin de que todos subsistan y nadie quiebre.
El BM no advierte que debe ayudarnos en materia competitiva, pues estamos importando mas que lo que exportamos. En el pasado año importamos alrededor de US$21,000 millones y exportamos unos US$9,000 millones.
El BM debe abordarnos a tener una economía de ahorro, pues nos damos el lujo de importar autos de alta gama desde Ferrari, Lamborghini, Bugatti y Pagani, y se venden todos.
Traemos para diversión a los artistas mas afamados del mundo, como si todos asistiéramos a sus presentaciones y efectivamente, todas son lleno total.
Por otro lado el BM, comparte absurdamente los objetivos de desarrollo sostenibles, (ODS) también llamada Agenda 2030 de la ONU, donde está el aborto, la agenda LGTB, la haitianizacion de la República Dominicana, la inducción a la homosexualidad a niños inocentes y jóvenes, a la pérdida de nuestra libertad, pérdida de nuestra soberanía, incluyendo el empobrecimiento que ellos aspiran reducir, control totalitario, y otros. ¿Es asi como RD se desarrollará? Me temo que no, nunca.
El BM, señala que RD tiene sus prioridades para seguir reforzando el entorno empresarial y la competitividad, pero resulta que esas prioridades, hasta ahora, no estan debidamente identificadas como el pais las necesita, pues con monopolios y oligopolios en materias tales como: Cemento, Varillas, Arenas de construcción, Combustibles, Refrescos o Sodas, Rones, Cervezas, Prestamos bancarios, Seguros, Periódicos, Agua, Telecomunicaciones, fertilizantes y otros, se imposibilita el desarrollo para tener un transparente ambiente de sana competencia entre los actores.
La economía dominicana, se autotiula abierta, y depende principalmente del Turismo y las Remesas, el comercio exterior, los servicios como Call Centers, Zonas Francas, la minería, la industria farmacéutica, componentes electrónicos, equipos médicos, siendo estos sectores los pilares de una economía medianamente diversificada y una industria medianamente desarrollada, relacionada con un minimo reemplazo de importaciones; un sector eléctrico, sujeto también a oligopolio, con Plantas a carbón, Gas Natural, Fuel Oíl, energía eólica, con un pais acostumbrado a los sempiternos apagones.
La economía de RD también se caracteriza, por tener el 95% de las empresas, que son Micro, Medianas y Pequeñas empresas y solo el 5% es constituido por las grandes empresas ya sean estas nacionales o multinacionales.
Tambien porque el 49% de la población no paga impuestos y el 51% vive en la informalidad. Poco bien hace el BM el pregonar, que RD posee una economía en excelente crecimiento.
La competitividad y las nuevas inversiones dependen en parte de la mejora de la educación y de las habilidades de los trabajadores, así como del aumento del comercio regional.
Es evidente que el sector eléctrico precisa de reformas para mejorar la gobernanza y la transparencia, para reducir pérdidas y financiar la inversión en ampliación de capacidad, en energías renovables y en mejora de la red eléctrica.
Se observa que lugares remotos son alimentados de energía eléctrica, desde la Capital, con una perdida exagerada en el trayecto. La mayoría de los dominicanos no paga la electricidad que consume y la población que la paga, cubre el costo de los morosos y de aquellos que la sustraen ante la mirada indiferente de los proveedores, para no perder votos, obviamente. ¿Puede o no el BM ayudar en estas políticas de desarrollo, o deja todo como esta?
Un problema enorme de RD, lo constituye la terrible inseguridad en Haití y su impacto en la República Dominicana, incluyendo los costos en la seguridad fronteriza, el aumento en la demanda de producción de alimentos para la República Dominicana, y los niveles inéditos de movilidad humana en la región.
El BM comparte junto con la ONU el criterio de que en RD hay apatridia, racismo, exclusión de vulnerables, y otros desaguisados cuando en realidad, los haitianos ilegales e indocumentados que han cruzado nuestra frontera, no son apátridas, pues según el Articulo 11 de su Constitucion, es haitiano: Todas las personas nacidas en Haití de padre o madre haitiana; todas las personas nacidas en el extranjero nacidos de padre o madre haitiana; y todas las personas nacidas en Haití de padre extranjero o, si no es reconocido por su padre, madre extranjera, siempre que descienda de la raza negra.
La ONU, la OEA, la UE, el FMI y el BM no quieren admitir la existencia de esa legislación y desean que todo hijo de haitiano ilegal e indocumentado, que nazca en RD, le sea concedida la nacionalidad dominicana, cuando ellos al nacer, constitucionalmente, ya tienen su nacionalidad: La haitiana.
Si estas organizaciones dejan esto en claro a los haitianos, muchos de los conflictos desaparecen o son minimizados. Pero, ninguno lo desea hacer, desean forzar a que RD sea la solución de ese problema de invasión u ocupación de nuestro territorio.
Si bien es cierto que se deben revisar las formas para facilitar el capital privado y atraer más inversión, reconociendo la oportunidad del país como un hub logístico, no menos cierto es, que las inversiones extranjeras no resultan tan atractivas por el tema del respeto al debido proceso, en el sentido de que la justicia es débil, cara y antojadiza.
RD necesita una mayor disponibilidad de uso de gas natural y de fertilizantes, consideran que paises Europeos, Brasil y Asia, absorben la gran parte de esa producción, y la presión sobre la agricultura y los pequeños productores.
En cuanto a la actual inversión extranjera en RD, Estados Unidos se mantiene como el país con mayor cantidad de capital invertido en el país, para un total de US$4,701.3 millones, seguido de Canadá (US$4,346.4 millones), Brasil (US$2,336.2 millones) y España (US$1,314 millones), según lo establece el Banco Central.
La CEPAL en un informe señala, que AL es una región con bajos niveles generales de inversión, donde la inversión extranjera directa es fundamental para el diseño de una política productiva y “Para lograr un impacto positivo de la inversión extranjera directa, es necesario articular las políticas de desarrollo productivo con la atracción de inversiones de alta productividad, en actividades que apoyen procesos virtuosos de desarrollo en términos de inclusividad, calidad del empleo, sostenibilidad ambiental, innovación y complejidad tecnológica. Las crisis en cascada que vive la región nos obligan a definir estrategias para posicionar a los países de América Latina y el Caribe en el panorama mundial de inversiones”, advierte, la CEPAL”.
La legislación dominicana no establece limitaciones ni restricciones para la participación de los extranjeros en actividades económicas, sin embargo, no permite la inversión en los siguientes renglones:
- Disposiciones o desechos de basura tóxicas, peligrosas o radioactivas no producidas en el país.
- Actividades que afecten la salud pública y el medio ambiente.
- Producción de materiales y equipos vinculados a la defensa y seguridad nacional.
Es vital la regulación de las empresas estatales de agua y saneamiento para aumentar la eficiencia y la calidad de la prestación de los servicios, reducir los residuos plásticos marinos y mejorar la gestión del agua, que es fundamental para la productividad agrícola. ¿Puede el BM influir en estos delicados temas, necesarios para nuestro desarrollo?
Es innegable la rápida ampliación de la base impositiva, la reducción de las exenciones y la simplificación del sistema fiscal para disminuir los costos de cumplimiento.
El BM preparó un informe sobre clima y desarrollo del país (Country Climate and Development Report) que identifica las prioridades para mejorar la adaptación de la República Dominicana al cambio climático, incluida la mejora de la resiliencia de la infraestructura a los desastres naturales.
Este informe no es conocido por nadie en RD y se estima que debe ser aireado en la Academia de Ciencias y las Universidades, de manera tal que veamos su alcance y sus posibilidades de ejecución. No nos den, luego, una “visita sorpresa”.
Se precisa un mayor involucramiento del sector privado en el desarrollo de infraestructuras para ayudar a financiar las necesidades de inversión que generen la creación de empleos y que los recursos del sector público sirvan para apoyar aún más la salud y la educación.
El BM nos dice que, a medida que la crisis de la deuda se ha desencadenado en muchos de los países más pobres del mundo, la atención se ha centrado en la búsqueda de reestructuraciones de las deudas individuales, a través del Marco Común del Grupo de los Veinte (G20) que es el principal foro de coordinación de políticas macroeconómicas entre las veinte economías más importantes del mundo, que incluye las perspectivas tanto de países desarrollados, como de economías emergentes.
Agrega el BM que esto sigue siendo una prioridad, pero la implementación continúa de manera lenta y carece de la previsibilidad necesaria para brindar confianza a deudores y acreedores.
El BM debe ayudar RD a evitar la acumulación excesiva de deuda sobre las consecuencias para la sostenibilidad de la deuda de una caída de las reservas internacionales netas a un valor negativo cuando los países recurren a instrumentos similares a la deuda, como las líneas de crédito recíproco.
Que nos ayude en algún proceso de conciliación de la deuda externa, que evidencia numerosos desafíos técnicos, a la hora de acordar los montos de la deuda que se deben tratar en una reestructuración.
Queda claro, que los presupuestos de los países en desarrollo se ven gravemente afectados en un contexto de reducción del acceso a los mercados y ayuda extranjera limitada.
No cabe duda de que el financiamiento para el desarrollo debe aumentar, y que los países tienen que gestionar mejor los recursos.
Esto pone de relieve la urgente necesidad de contar con políticas fiscales prudentes, para evitar una acumulación excesiva e inmanejable de la deuda.
Los grandes problemas fiscales surgen de decisiones relacionadas con el gasto y los impuestos temporales, cíclicos e ineficientes, combinados a menudo con la monetización del déficit fiscal, lo cual socava la estabilidad macroeconómica, las monedas locales y la inversión, dejando una deuda insostenible.
RD, como país en desarrollo enfrenta fuertes desafíos, pues su deuda cada día es más alta y más cara, por lo que necesitamos tener políticas fiscales más amplias donde los más ricos, paguen más.
Hay que tomar medidas de alivio de la deuda y la reanudación de los flujos de recursos externos, y también adoptar reformas de políticas, como el aumento de la eficiencia y la moderación del gasto público, en especial la nómina publica, los subsidios excesivos y las exenciones impositivas, y la ampliación de la base tributaria.
Se justifica plenamente mejorar la disciplina fiscal adoptando normas fiscales que aumenten la confianza y sirvan de sustento a los responsables de formular políticas y los inversionistas, y ayuden a evitar los ciclos de auge y caída.
También se necesita un compromiso fiscal con respecto a las inversiones para la preparación ante desastres naturales y emergencias sanitarias, muy comunes en esta área del Mar Caribe.; esto facilitará la reducción del costo de las catástrofes y la acumulación de deuda insostenible cuando se producen desastres.
El BM debe ayudar a RD, en la evaluación de la sostenibilidad de la deuda y la urgente necesidad de una mayor transparencia de la misma, cuando el monto de esta se considere poco claro, si los contratos de deuda individuales que contienen cláusulas de confidencialidad tratan de evitar el examen del público o depender de cuentas de fondos en custodia y el uso de garantías.
El BM debe ayudar a RD en el tratamiento recíproco de las líneas de crédito, los pasivos contingentes, la deuda de las empresas estatales y los instrumentos con garantía asimilables a la deuda.
No sé si RD posee lo que se denomina “el déficit de caja negra” entre sus reservas brutas, que son las reservas brutas utilizables y las reservas netas, y la falta de transparencia en torno a las líneas de crédito recíproco y sus usos.
El Banco Mundial estima que ha actuado para mejorar la transparencia de la deuda de RD, pero aún queda mucho por hacer, como sería que las estadísticas sean más exhaustivas y estén a disposición de todas las partes interesadas.
El BM recomienda con respecto a la facilitación de la reestructuración de la deuda, para lograr una resolución rápida, considerar variadas herramientas:
“(i). Existe la posibilidad de incluir, por ejemplo, una cláusula agregada de acción colectiva en todos los nuevos instrumentos de deuda de los sectores oficial y privado y de equivalentes de deuda. Otras medidas que podrían facilitar las reestructuraciones son limitar las recuperaciones de los acreedores, proteger los activos soberanos de los embargos o incorporar una cláusula de “acreedor más favorecido”.
El último enfoque es actualmente contemplado por Sri Lanka; tiene como objetivo asegurar que, si algún acreedor recibe del país deudor una oferta mejor que la acordada en la reestructuración, dicha oferta se extienda a todos los demás acreedores.
Una medida como esta incentiva a los acreedores, a aceptar condiciones de reestructuración comparables.
Formulas de Reestructuración de la deuda. Opinión del FMI.-
Señalan expertos del Fondo Monetario Internacional que, se han planteado dos grandes tipos de propuestas.
- Introducir Cláusulas de Acción Colectiva (CAC) que ya son práctica aceptada en otros mercados, de forma más universal en los contratos de deuda soberana.
- Establecer un marco normativo como lo seria: el Marco de Reestructuración de Deuda Soberana (MRDS) que permitiría realizar una reestructuración de mayor alcance.
Expresan los Señores del FMI: El objetivo de las propuestas es reducir las demoras en la reestructuración de las deudas insostenibles haciendo frente a los problemas que actualmente se plantean en esas circunstancias.
En la actualidad, el acreedor que se mantiene firme puede frustrar un acuerdo aceptable para la mayoría y, muy posiblemente, obtener para sí mejores condiciones, lo que constituye, además, un desincentivo para que otros acreedores se organicen. En resumen, no existen incentivos para resolver el problema de la acción colectiva.
La evolución de los mercados de capital ha agravado esas dificultades. La reestructuración de deudas ya era difícil en los años ochenta, cuando se podía congregar a los tenedores de la mayor parte de la deuda de un país reuniendo en torno a una mesa a los representantes de 15 ó 20 bancos. Aun así, la reestructuración era lenta, y en muchos países muy endeudados el crecimiento económico no se reanudó hasta la puesta en marcha, en la década de los ochenta, del Plan Brady, que podría describirse como un mecanismo informal de reestructuración de deudas.
Hoy las cosas son aún más complicadas. En los años noventa los países recurrieron cada vez en mayor medida a la emisión de bonos para obtener financiamiento. En consecuencia, la proporción de deuda pública externa frente a acreedores privados instrumentada en bonos casi se cuadruplicó, llegando a alrededor del 60% en 2000. La diversificación de las fuentes de financiamiento es un hecho saludable, pero puede convertirse en un obstáculo al renegociar una reestructuración.
Esto se debe a que puede resultar más difícil coordinar la actividad de los tenedores de bonos que la de los acreedores bancarios. A diferencia de éstos, los tenedores de bonos suelen no mantener una relación a largo plazo con los deudores, y además tienen más incentivos para demandar a los acreedores morosos, porque, también a diferencia de los bancos, no tienen que repartir el producto del litigio. La situación se complica aún más por la creciente diversidad de instrumentos de deuda y de instrumentos financieros derivados que están en juego. Dados todos esos factores, es difícil reunir a todos en una misma sala y llegar a un acuerdo que todos acepten como solución justa.
Ambas propuestas —las CAC y el MRDS— facilitarían reestructuraciones más rápidas y ordenadas. Voy a tratar de describir brevemente el funcionamiento de cada uno de esos mecanismos.
Las CAC se aplican a las emisiones de bonos individualmente consideradas. Permitirían a una determinada super mayoría de tenedores de bonos pertenecientes a una emisión concreta acordar una reestructuración que obligaría a todos los tenedores de esa emisión: ese es el efecto de la cláusula. Además, impediría el bloqueo de las negociaciones en el caso de emisiones individuales de bonos, lo que facilitaría cualquier reestructuración que sea preciso realizar. El proceso podría acelerarse con la creación de un registro de tenedores o con la celebración de acuerdos de fideicomiso. El recurso a las CAC representaría una alternativa mejor que el sistema actual, por lo que el FMI se ha comprometido a promover su utilización entre sus países miembros.
La propuesta referente al MRDS es de mayor alcance que el de las CAC, y podría constituir un adecuado complemento de estas cláusulas. Se trata de un mecanismo que, al ser activado, permitiría a los acreedores y a los deudores negociar una reestructuración realizando una agregación de los distintos instrumentos y concertando un acuerdo que tendría carácter vinculante para todos por decisión de determinada super mayoría al igual que en la legislación nacional sobre insolvencia, el mecanismo agregaría los créditos a efectos de la votación y podría aplicarse a todos los créditos existentes. Se establecería un foro independiente y centralizado de solución de controversias encargado de verificar los créditos, garantizar la integridad del proceso de votación y resolver las controversias que se planteen. Al establecer el lugar y la secretaría para estas actividades, dicho foro permitiría una negociación más ordenada y ágil de la que parece factible en estos momentos.
Finalmente, cual de las opciones el BM recomienda usar por parte de RD: Ya sea introducir Cláusulas de Acción Colectiva (CAC) o establecer el Marco de Reestructuración de Deuda Soberana (MRDS) que permitiría realizar una reestructuración de mayor alcance.
Nos queda claro, sin necesidad de ser economista, que la función del BM, en RD, dista mucho de las actuales ayudas institucionales que se espera de dicha institución.
¡Solo siendo dominicano, se siente lo que yo siento!
Por Manuel Berges
