Durante tres largos años en la frontera dominico-haitiana, por tierra, aire y mar, ha pasado de todo, en lo que tiene que con la soberanía y la seguridad de nuestra nación respecto de Haití.
Haití es un país en el limbo históricamente hablando, es decir, es un terremoto histórico interminable que vive contaminando el territorio y la soberanía de la nación dominicana.
¿Y cuál ha sido la actitud del gobierno dominicano del PRM frente a ese volcán histórico que es Haití?
En Haití ni el pueblo ni ningún sector de poder han tenido nunca ningún proyecto de nación.
Nosotros, por el contrario, vale decir, el pueblo, la nación y el Estado dominicano sí somos un verdadero proyecto histórico de nación desde el 27 de febrero de 1844.
En esas luchas históricas por la libertad y la independencia del pueblo dominicano le demostraremos fehacientemente a Haití cómo se construye un proyecto histórico de nación, de Estado y de pueblo.
La guerra de independencia de 1844 y la guerra de la Restauración de 1863 demostraron ampliamente cuánto valor y visión histórica hemos tenido los dominicanos.
Somos un proyecto histórico de nación. Haití, por el contrario, es un desastre total.
Las bandas se han apoderado de Haití.
Y lamentablemente el actual gobierno dominicano del PRM ha sido débil frente al gran peligro que representa Haití para nosotros y para el Caribe en sentido general.
La comunidad internacional se ha cruzado de brazos frente al terremoto histórico que constituye y representa Haití en el Caribe.
Durante estos tres años del gobierno del PRM los haitianos se han servido con la cuchara grande pasando ilegalmente por la descuidada frontera que hay entre estas dos naciones.
La verja perimetral, construida con malla ciclónica, no va a impedir ni el contrabando de haitianos ilegales ni el contrabando de armas ni el contrabando de drogas.
La situación ha llegado al extremo de que tenemos ya tres millones de haitianos ilegales que viven desafiando la soberanía y la seguridad de la nación y del Estado dominicano en nuestro propio territorio.
La política tiene que ser defender la soberanía y la seguridad del Estado y la nación dominicana siempre.
La politiquería es cerrar la frontera para que esta decisión sirva de pivote o alimento al proyecto reeleccionista en marcha.
Estamos frente a un gobierno muy débil que no ha sabido defender con firmeza e invariabilidad la soberanía y la seguridad de nación y del Estado dominicano frente Haití.
Nosotros sí hemos asumido siempre con total firmeza la defensa de la soberanía y la seguridad de la nación y del Estado dominicano por lo que estamos en contra de todos los males y desgracias que nos vienen de Haití incluyendo el canal que se construye en Haití para desviar el cauce del río Masacre.
Esta situación política que nos acogota y nos destruye tiene que ser sustituida por una nueva situación política a partir de mayo y agosto de 2024.
POR EL DOCTOR VÍCTOR MANUEL PEÑA
*El autor es doctor en Economía, licenciado en Derecho, tiene dos maestrías y es miembro de la Dirección Central de la Fuerza del Pueblo.