La posibilidad de poder trasmitir información en las Redes Sociales es ilimitada y sobre todo poco regulada en la actualidad.
Una de las grandes debilidades del mundo de las Redes Sociales es la poca penalización a los contenidos no necesariamente sexuales u ofensivos, sino veraces.
La cantidad de informaciones que recibimos a diario a través de las redes, grupos de whatsapp es impresionante y asombrosa.
Desde mensajes jocosos, pornográficos, religiosos, políticos, faranduleros entre otros, recibimos de todo tipo de personas y de todos los estratos sociales.
Lo mas asombroso, es ver en periódicos o personalidades de gran influencia en la sociedad, como le dan credibilidad o veracidad a noticias falsas y en perjuicio hasta del propio país.
Que nos cuesta pensar y analizar las informaciones que estamos reenviando o publicando en nuestros redes sociales y que efecto pudieran generar que afecte la imagen nuestra, del país o de alguna persona o negocio en particular.
No todo se publica, no todo se reenvía; somos aunque no lo creamos, lo que publicamos y la imagen que se hacen los demás de lo que colgamos en las redes sociales.
Pensemos, luego reenviemos …