Aunque un poco tardío, a partir de las siguientes líneas expresaré lo que entiendo va a pasar en los Estados Unidos de Norteamérica el martes 3 de noviembre del 2020, en unas elecciones en las que el partido demócrata, con su candidato Joe Biden, pretende evitar la reelección del atípico mandatario, el presidente Donald Trump.
Recuerdo estar en un seminario de crecimiento personal, cuando uno de mis mentores me informó que un artículo escrito por mí sobre las elecciones en los Estados Unidos en el 2016, estaba siendo comentado en una cadena de televisión de esa gran nación.
Sin dudas, aquello me indicó que lo que había escrito tuvo un impacto incalculado por mí al momento de escribir el artículo de marras, el cual con su solo nombre llamaba la atención.
El solo titulado se convirtió en una pieza llamativa en las páginas del periódico El Nuevo Diario digital, dirigido por el excelente comunicador, compueblano y amigo licenciado Persio Maldonado, como tuve a bien decir en otro artículo.
El título del artículo, al que pueden tener acceso en las páginas del nuevo diario digital fue: “LA TERCERMUNDIALIZACIÓN DE LAS ELECCIONES PRESIDENCIALES EN LOS ESTADOS UNIDOS: DEL CAOS, LA INCERTIDUMBRE AL ORDEN”.
Aunque estoy absolutamente convencido de que las tres palabras finales del artículo, terminaron siendo premonitorias en los años en que ha gobernado el actual presidente, el cual llegó al poder en medio DEL CAOS, luego vinieron LAS INCERTIDUMBRES y finalmente hubo de recurrirse AL ORDEN, para contrarrestar lo que indicada ser una táctica inusual en la primera potencia del mundo, en la que sectores de oposición usaron las violencias como armas de desgaste de la popularidad del presidente.
Esta táctica muy usada en países del tercer mundo, en períodos electorales, se observa extraña en un país que ha sido modelo de la democracia representativa, cuyo régimen económico dio nacimiento a la misma, como bien describe el profesor Juan Bosch en su libro El Pentagonismo Sustituto del imperialismo.
Debo ser sincero en afirmar que no sabía que el contenido fundamental de ese artículo iba de nuevo a ser parte de las tácticas en contra del presidente Donald Trump en las elecciones del 2020. ¡Honestamente, parece increíble!
En razón de que estas opiniones llegan faltando días para el resultado electoral, voy a ahorrar suministrar las informaciones de las montadas manifestaciones de grupos radicales, en las que se destruyen todo lo que se tiene al paso de los manifestantes. Peor, los ataques injustos en establecimientos comerciales por miembros de esos grupos, alegando tener derechos para golpear y hasta matar.
Repetimos, esas acciones colocan a los opositores al presidente actual en posiciones delicadas para los que estoy definiendo como “Elementos Subliminales en las Elecciones de USA del 3 de noviembre del 2020.”
Si no me ha leído antes, no os desesperéis, como decía un ex funcionario de alto nivel en mi país, la República Dominicana, durante el gobierno del Ingeniero Hipólito Mejía Domínguez.
Sí estoy tratando esos temas aparentemente no tomados muy en cuenta por analistas comprometidos con una u otra posición, a favor de su candidato, es porque van a ser determinantes en los resultados del martes 3 de noviembre 2020.
¿Cuáles son esos Elementos Subliminales en las elecciones de USA del 3 de noviembre del 2020, que no ven muchos?
Al final del artículo, los detallaré y para algunos daré lo que serán mis conclusiones de por dónde van a venir los resultados finales, definiendo al ganador de las elecciones.
Por lo tanto, estaré diciendo que esos elementos serán los que definirán los resultados, independientemente de lo que estén reflejando las encuestas, ni cuál sea la actitud de los grandes medios o de personalidades en relación con la pandemia o Sindemia del conocido virus mundial.
¿Quién será el agraciado por esos elementos?
Antes de entrar a definir los elementos, me voy a permitir reproducir las conclusiones a las que arribé en el artículo publicado en el nuevo diario en fecha 20 de enero del 2017, titulado: “Llegó el momento de Donald Trump”
Las palabras concluyentes del vaticinio a la que se refirieron en el medio de comunicación en los Estados Unidos, de mi artículo sobre la tercer mundialización de las elecciones en USA, fueron estas: CITO:
“En ese panorama nada es seguro. Por lo que Donald Trump podría emerger de entre las amarguras o los desencantos acumulados por los grandes sectores de los Estados Unidos, como la persona que puede producir el más grande espanto mundial, siendo elegido como presidente de la primera potencia del mundo”.
Resultaba un asombro que yo siendo un neófito en el análisis de la Geopolítica pudiera estar viendo lo que incluso muchos no veían dentro del propio territorio de USA.
Al momento de valorar las que serían las principales consecuencias de la inesperada elección de Donald Trump, las cuales aparecen en el artículo del 20 de enero del 2017, de nuevo, tomé en cuenta detalles poco conocidos de quien se estaba convirtiendo en un presidente atípico “no político”, por lo menos, político tradicional.
Al cumplirse los 4 años en la jefatura del Estado de la primera potencia del mundo, voy a repetir esas conclusiones, las cuales entiendo fueron tan acertadas como fue dar por ganador a quien pocos vieron ganar.
Estas fueron las consecuencias que vi de lo que vendría en los Estados Unidos de Norteamérica, con el triunfo de Donald Trump: Citamos:
“Finalmente, los que conocen mis tertulias saben que dimos por sentado el triunfo de Trump antes de que se conocieran los resultados electorales. Sin embargo, aquí van algunos de nuestros pronósticos a partir del día de mañana 20 de enero del 2017, cuando jura el presidente Trump”:
“a) La humanidad finalmente acepta que el mundo ha experimentado un cambio de era, quedando claramente definido el panorama de la superación de la Era Industrial como fue conocida, pasando a entrar de lleno, en forma consciente, en una nueva revolución industrial, donde los mercados son desde ya, la base de sustentación de los nuevos actores”.
“b) Los Estados Unidos de América seguirán liderando el panorama de nuestro mundo, recobrándose de su mayor y más grave crisis a niveles de los mercados mundiales”.
“c) El nuevo presidente estará al frente de una nueva mayoría de líderes capitalistas, los cuales entienden que es necesario quitar barreras entre las líneas de los distintos sectores que interactúan y crean riquezas en el mundo actual”.
“d) Contrario a lo que se evidenció en la campaña, el nuevo presidente será más equitativo con los distintos sectores que han hecho grande a la nación norteamericana, propiciando un acercamiento entre los que se sienten desplazados o marginados por el sistema imperante”.
“e) El presidente impulsará cambios mundiales, dando prioridad a los reclamos de sectores que abogan por una mayor transparencia no solo de los mercados mundiales, sino de los dirigentes políticos en aquellas naciones donde Estados Unidos tienen marcadas influencias”.
“f) El presidente ganará rápidamente popularidad en el mundo, por impulsar el freno de políticas anteriores, en las que era evidente la acentuación del lema pernicioso del neoliberalismo: Laisser fair, laisser passer (Dejar hacer dejar pasar), lo que se logrará con alianzas mundiales de los pueblos con su nación”.
“g) El presidente se repondrá de su imagen contestaria, ya que respetará el protocolo asignado a figura de su magnitud, debido a que el presidente de la nación más poderosa de la tierra influye hasta con gestos en el resto del mundo”.
“h) No quisiera entrar de lleno en lo que vemos desde este momento, pero si los dirigentes del partido republicano saben aprovechar la oportunidad que le puso en sus manos el pueblo norteamericano, ayudando a gobernar bien a su presidente, sin exhibir ese tercer mundialismo al que nos referimos en el artículo citado, en el 2020 tendremos a un Trump respetado y mejor valorado”.
“i) Por último, quienes quieren seguir manteniendo sus actuaciones como si fueran niños llorones, deben reconocer que el nuevo presidente se preparó para estos momentos y no creo que nadie en ese país pueda sentirse en mejores condiciones que él para empezar a llevar a cabo sus sueños de una nación mejor. Por esa razón, hay que felicitar a personas como Trump, sin dudas algunas, un ganador”.
He subrayado las palabras, como formas de establecer que fueron escritas en ese artículo al cual citamos, para llegar a definir los elementos de este análisis.
En la letra a destaco estas palabras: “un cambio de era”. Quien tenga dudas de que el mundo entró en otra era, es evidente que debe vivir en alguna de las selvas donde no llegan los medios masivos, ni las redes sociales. Lo único extraño es que el cambio de era nos llegó en medio de una pandemia, de cuyas consecuencias no vamos a aventurarnos ahora, pero sí podemos decir que a partir del año 2021, el mundo sufrirá dramáticos cambios, algunos probablemente no muy agradables para quienes creen que solo sus planes tienen cabidas.
Lo que definí en las letras b y c se ha producido sin ninguna duda razonable, como dicen en USA. En la actualidad, los sectores que hicieron grande a USA han estado siendo atendidos, como son las grandes fábricas, muchas de las cuales habían abandonado el territorio de su país.
Aclaro que en este artículo no estoy valorando la gestión del actual presidente. Lo que evalúo son mis propias palabras, con las cuales pueden estar de acuerdo o no.
Lo que decimos en la letra c ha sido sin dudas, una política de la actual gestión, provocando cambios en distintos países, incluyendo a la República Dominicana, en cuyas elecciones del 5 de julio del 2020 se sintieron las acciones de la política exterior de ese país y sobre todo, su conocida intervención para evitar que el entonces presidente Danilo Medina reformara la Constitución con el expreso propósito de perpetuarse en el poder.
En otros países, los temas de la Geopolítica giraron y siguen girando dentro de esta política que vimos vendría.
Las alianzas mundiales que vimos al detallar la letra f son ahora mismo uno de los elementos subliminales a los que nos vamos a referir al finalizar el análisis. Nunca como ahora, se anunciaron desde las oficinas del presidente de USA, los grandes acuerdos entre naciones como ha sucedido con Donald Trump.
Lo que definimos como una gran oportunidad del partido republicano al lograr la elección de Donald Trump, se ha cumplido. A pesar de las fuertes oposiciones de los demócratas, antes de llegar la pandemia, los índices económicos de los Estados Unidos se dispararon, gracias a las correctas políticas implementadas protegiendo los sectores internos e impulsando a sus verdaderos aliados en el exterior.
Poco importa que los opositores al actual presidente reconozcan esos logros. Sin embargo, los mismos han servido para volver a reactivar la devastación inicial provocada por la pandemia conocida.
Con esas palabras acerca de las consecuencias que definimos a la llegada de Donald Trump, ahora pasamos a definir los elementos subliminales que decidirán las elecciones.
A nuestro entender, estos son los elementos no analizados en profundidad, que decidirán los resultados electorales, a saber:
- El partido demócrata nuevamente juega a colocar como el real poder del gobierno a una mujer. En el 2016 era Hilary, ahora es Kamala. Ese elemento hará que amplios sectores voten en contra de Joe Biden, por razones puramente culturales.
- Los estrategas de la oposición al mantener silencios ante los sectores radicalizados, propiciadores de violencias y discriminaciones, no calcularon que los peores daños los iban a recibir los sectores más vulnerables, a quienes las palabras “Ley y Orden” les llevará a votar masivamente en contra de la oposición.
- La evidente vulnerabilidad del candidato demócrata, quien presenta condiciones no muy buenas en su salud, mandan el mensaje de no confiabilidad de su posible elección, alejando votantes, por la incertidumbre de su posible sustitución. Aquí se concatena el elemento citado en la letra a.
- Otro elemento interesante es que en 4 años, el partido demócrata se mostró incapaz de tener nuevos líderes con la categoría de un Obama o Bill Clinton. Ni Biden ni kamala se asemejan a ellos, ni siguiera a Hilary, quien tenía experiencias de Estado y arrastraba la popularidad de su esposo, Clinton, un buen presidente, a pesar de los conocidos escándalos de su gestión final.
- Los éxitos de la política exterior del presidente actual, son unos de los elementos subliminales para evitar lo que ellos persiguen, derrotar la reelección. En este elemento, entran las creencias y los sistemas de creencias internas y externas, es decir, las religiones y las luchas de los contrarios.
- Un elemento repetido de las elecciones pasadas, que ahora está en contra de la oposición, es el funcionamiento correcto de las instituciones principales del estado de derecho y de la democracia, con los escándalos atribuidos a líderes demócratas o familiares de algunos, como es el que tiene en el ojo de la tormenta al hijo del candidato Biden. Los medios de comunicación han vuelto a ser piezas claves en momentos electorales. No hay que recordar lo que le han sucedido hasta a presidentes en funciones, con algunos de esos escándalos que una gran parte de la población norteamericana parece aborrecer.
- El otro elemento subliminal de gran poder es que las franjas de los votantes del presidente Trump siguen apostando a él, a pesar de todos los acontecimientos negativos experimentados.
- Este elemento que vamos a mencionar puede ser clave en las franjas de los indecisos. Nos referimos al entusiasmo de seguidores de uno o de otro. Lo que se observa en los seguidores de Trump es un entusiasmo desbordante, mientras que los seguidores de Biden lucen con la estima en el suelo. En cualquier campaña electoral, ese elemento consolida los votos de los candidatos, debido a que son los primeros en salir a votar, arrastrando a más personas.
- El penúltimo elemento es la presencia de la pandemia del virus. Aunque los opositores han pretendido echarle culpas al presidente de los efectos de la misma, la gran población y el mundo saben que ese problema no es exclusivo de los Estados Unidos de América. La oposición en USA casi copia la estrategia que se usó en la República Dominicana. Los resultados de aquí fueron catastróficos para quienes pretendieron usar la pandemia en su beneficio. En otros escritos en mis redes sociales me referí a ese tema, en el que los dominicanos pudimos ver cómo el gobierno dio la impresión de poner en manos del candidato del gobierno la responsabilidad de los resultados de la pandemia, mientras el presidente estaba guardado, teniendo que salir al final, cuando ya era tarde. En USA, por lo se ha visto, el presidente ha dado la cara, aunque su forma de gobernar le sea chocante a gran parte de la población.
- El último elemento subliminal que vemos tiene que ver con la forma de elección en USA. Sin dudas, la elección delegada mediante los electores escogidos, es el gran dolor de cabeza para la oposición. El sistema en ese país ha sido diseñado para evitar que el populismo pueda ser una forma de elegir a su presidente.
Con ese último elemento, estamos en condiciones de decir que en las elecciones del martes 3 de noviembre, del 2020, de nuevo, contra vientos y mareas, el presidente Donald Trump ganará las elecciones presidenciales.
Algo que probablemente suceda es la reelección se produzca por partida doble, es decir, el partido republicano gane la elección popular y la elección por delegados.
Muchos vaticinan que la oposición está jugando a que no se vislumbre un ganador desde las primeras horas de la noche o en días posteriores.
En nuestro análisis, descartamos que eso suceda, por el poder que le atribuimos a esos elementos subliminales.
Joe Biden y el partido demócrata tendrán que esperar a las elecciones del 2024, de acuerdo a que lo que vemos.
De nuevo, sé que muchos de mis lectores y amigos, van a calificarme como seguidor del presidente Trump, como me acusaron por los análisis que hice. A ellos les vuelvo a decir que estas son mis visiones de lo que veo.
Si ocurre lo contrario, la oposición habrá triunfado. Sin embargo, cada hora que pasa reduce la posibilidad de Joe Biden y ensancha las brechas para la victoria de Donald Trump.
¿Son acertados estos elementos subliminales que hemos detallados ampliamente? El martes 3 de noviembre, 2020, después de las 11 pm y al día siguiente, todas las encuestas que vieron ganador a la oposición, quedarán desmentidas.
En vista de que en el artículo donde enunciaba las consecuencias de la administración de Trump, expresé palabras que quiero repetir, con algunas leves modificaciones. Fueron estas:
“Solo me resta decir que espero en Dios que la nueva administración de los Estados Unidos de América con el Presidente Trump a la cabeza, mantenga en ascuas a muchas naciones y líderes mundiales, encaminando a la humanidad hacia nuevos senderos de paz y armonía y quienes tengan en sus mentes acciones de violencias en cualquier partes del planeta queden frenados para siempre. Eso es lo que merece el mundo: PAZ Y BIEN.
Atentamente,
Por Daniel Mena
