Desde hace años, pero más ahora y después del COVID-19, queda clarísimo que hay que ampliar la conectividad digital al nivel colectivo. Es una nueva manera de la educación y creación de fuentes de empleos y negocios.
La pandemia dejará a muchos sin empleos y se dice que ampliará los rangos de pobrezas; además de una recesión económica que costará un tiempo superarla.
Pero no hay nada tan malo, que no tenga algo bueno. Esa realidad dejará una significativa modificación en el cuerpo social y económico, en que se abrirán oportunidades de progreso.
Comencemos por profundizar en el sistema educativo nacional, donde tenemos cautiva a la tercera parte de la población nacional, conformada por niños y jóvenes.