EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- Con 33 años colaborando con el Estado para mejorar la calidad educativa del país, Acción Empresarial por la Educación (Educa) ha comprendido que el reto en República Dominicana no es crear políticas públicas, sino aplicarlas dentro de las aulas, lo que pone de manifiesto la necesidad de un enfoque integral que fortalezca el cumplimiento de roles por parte de los involucrados en la formación de los niños.
En ese aspecto, su presidenta, María Waleska Álvarez, precisó que Educa busca, entre otras cosas, empoderar a la sociedad dominicana, fortaleciendo su conocimiento sobre los deberes y derechos que le asisten en relación con la educación de sus hijos, a través del programa «Familias Comprometidas».
Detalló que “Familias Comprometidas” está estructurado con diez módulos, que permiten a los padres entender el rol que deben cumplir para que República Dominicana pueda tener una educación de calidad.
Álvarez presentó sus ideas durante la primera entrega de «La Saga», una serie de cuatro programas especiales realizada por El Nuevo Diario, de la mano de la comunicadora Julia Muñiz, para explorar el ámbito educativo de República Dominicana a través de las perspectivas de actores del pasado y del presente.
(Ver programa).
“Lograr una educación de calidad requiere de que cada uno de nosotros asuma el rol que le corresponde, el Gobierno tiene un rol que jugar en materia de la política pública, como facilitador de los recursos. Los docentes definitivamente también tienen unos compromisos y unas responsabilidades. La familia, por su parte, también tiene una responsabilidad y un rol que jugar”, indicó.
Aclaró que la iniciativa de Educa no busca enfrentar a los maestros y a los padres, sino más bien fomentar la colaboración y la asunción de roles por parte de todos los actores involucrados en la educación, tras enfatizar que lograr una educación de calidad es una responsabilidad compartida que involucra al Gobierno, los docentes y las familias, pero cada uno debe cumplir el rol correspondiente.
Índice de calidad
La presidenta de Educa reveló que también están trabajando en la elaboración de un índice de calidad objetivo, debido a que en la actualidad la medición de los profesores se basa en elementos subjetivos.
En ese sentido, Álvarez propuso dos criterios fundamentales para calificar a los docentes: el compromiso con la educación, que se mide en términos de horas de clases dictadas, jornadas participadas y tiempo dedicado al aula; y el progreso de los niños bajo su responsabilidad; es decir, cuánto aprenden y qué aprenden en el aula.
Despolitizar
Aunque es consciente de que la política no es mala, María Waleska Álvarez dijo que no desconoce que para lograr una continuidad de Estado y los niveles de calidad a los que aspira el país, es imperante que reine la institucionalidad dentro del ministerio que maneja la política educativa de la República Dominicana.
Por lo que soñando con lograr un sistema educativo institucionalizado, en el que los actores puedan garantizar la continuidad de Estado, Educa propuso que todos los cargos docentes y administrativos sean otorgados por concursos.
“Hemos propuesto que hoy en día el Consejo Nacional de Educación, que es el mayor órgano para regular la política educativa, no esté en manos de una mayoría representada por el Gobierno, sino que el poder resida en la sociedad”, comentó.
De igual forma, planteó que tanto el ministro como el viceministro de Educación tengan impedimentos legales para optar por cargos electivos en los próximos tres o cuatro años posteriores a su gestión. Pero también, que los directores regionales y distritales puedan realizar ninguna actividad política, más que el solo hecho de ejercer su derecho al voto, mientras sean responsables de dicha área.
