Las buenas iniciativas necesitan de buena ambientación en ciertos términos que permitan la concretización de dichas propuestas. República Dominicana avanza en materia digital, demostrando que existe voluntad por parte de algunas de nuestras autoridades en crear las condiciones necesarias para la optimización de un mejor país. Tal es el caso de La Oficina Gubernamental de Tecnologías de la Información y la Comunicación (OGTIC), anunciando lo que pudiese ser uno de los mejores capítulos a cursar en materia digital y de optimización de servicios del Estado. Es posible que, debido a la falta de conocimiento, no podamos dimensionar lo que significa en materia social contar con una herramienta como la propuesta recientemente. “Soy Yo RD: Mi carpeta ciudadana”. Solo faltaría garantizar el carácter necesario que necesita el proyecto y hacer unas puntualizaciones de lugar, y estaríamos hablando de un elemento capaz de trastornar para bien lo que hemos conocido hasta hoy como servicios públicos.
La Oficina Gubernamental de Tecnologías de la Información y la Comunicación acaba de dar anuncio a una aplicación que lleva por nombre “Soy yo RD: Mi carpeta ciudadana”, la cual esta disponible en estos momentos en Android y iOS; Play Store y App Store. En una primera puesta en escena la plataforma permitirá dar acceso a los usuarios a informaciones básicas, tomando en cuenta que por el momento todo consiste en una iniciativa que consiste en avances progresivos para el logro de la meta deseada. La pregunta sería: ¿Qué es esta aplicación? ¿Qué propósito tiene la OGTIC con esta iniciativa? ¿Está nuestro país preparado para estas funciones? ¿Qué información podremos encontrar en esta aplicación? ¿Habrá criterio para dar iniciativa a esto? ¿Estamos en conocimiento de lo que representa esta iniciativa? Debemos contar con las respuestas a estas preguntas si queremos formular y hacernos con el criterio para un uso correcto de esta propuesta.
“Carpeta Ciudadana” es una plataforma de acceso rápido que busca empoderar a los usuarios en materia digital para el acceso directo a datos personales relevantes. Cédula de identidad electoral, licencia de conducir, consulta de afiliación a seguro de salud, contratos de basura con el ayuntamiento del Distrito Nacional, facturas con las EDES, informaciones académicas; estos son solo algunos de los accesos que se planea ofrecer a los usuarios. El propósito de la OGTIC es garantizar que los ciudadanos conozcan y mantengan informaciones acerca de variaciones en tiempo real, brindándole un ecosistema de control de su estatus en diferentes aspectos esenciales. Claro que, en una continuidad del proyecto contaríamos con otras informaciones como numeración de nuestro pasaporte, historial de aporte de pensiones, entre otras informaciones pertinentes.
Tendríamos que evaluar si contamos con las condiciones necesaria para la ejecución. Un proyecto de sociedad no tiene razón de ser cuando la sociedad misma pone en duda si existe la plataforma necesaria para su ejecución. Y es la misma sociedad la que gustaría de algunas respuestas previas. Nuestro país ha sido víctima de ataques y dejado entrever que nos falta un poco en materia de ciberseguridad; qué haríamos frente a una aplicación móvil capaz de gestionar toda la información privada que comparten el Estado y el ciudadano. Por tanto, debe existir la disposición de las inversiones necesarias para resguardar nuestras informaciones, y hacernos entender como sociedad que podemos contar con la seguridad necesaria para un uso en paz.
También, sería interesante que comencemos las conversaciones necesarias para eficientizar el internet de nuestro país. No solo mejorar la calidad del servicio, sino contar con la planificación necesaria para un desplazamiento total del servicio, garantizando la inclusión pertinente a los menos favorecidos. Un paso importante necesita iniciativas importantes, por lo que, es tiempo de que la planificación de República Dominicana entienda que se debe garantizar el acceso necesario a la internet, si queremos convertir esta iniciativa en un hito histórico. Y siendo realistas, mucha de la información que brindará la plataforma es para un uso consecuente de los menos favorecidos. No quisiera argumentar que es el público objetivo, pero de entrada si es un segmento al que pudiese impactar positivamente, más que a otros fragmentos de la sociedad. Sin contar que es el internet mismo el que da cabida a esta iniciativa; al menos, de entrada.
Otro aspecto importante es la armonización que deberán tener las instituciones públicas. El objetivo principal de esta aplicación móvil es el acceso a la información fidedigna y actualizada, capaz de darnos soporte para una toma de decisión mejor pensada sobre la base de información pertinente; al fin, podremos tomar decisiones soportadas en información. Sin embargo, el correcto desenvolvimiento de este servicio depende de la comunicación integral del estado dominicano, aspecto donde nuestra clase política nos ha quedado a deber, sin distinción partidaria alguna. Es necesario que la mesa de diálogo se lleve a cabo, porque puede ser la OGTIC la organización que contribuya a la eliminación de la falta de armonización entre las instituciones públicas en materia de comunicación. De hecho, la aplicación misma puede ser el vehículo que necesite el país para un lineamiento articulado de datos. A largo plazo, esta pudiese ser la nube de la nación.
Es importante que el usuario sea tomado en cuenta en términos de decisiones. La aplicación no solo debería ser una nube de especificidades de datos generalizados. Puede ser, en casos pertinentes, el propio ciudadano que pueda contar con el acceso a la actualización de informaciones importantes para su uso personal. Sería digno y preciso poder contar con una interfaz que nos haga parte activa de un sistema de información pública integrada. Esto podría ir en consonancia con el propósito en la disminución de los tiempos, ofreciendo la capacidad de modificar por cuenta propia algunas informaciones personales.
Otro aspecto importante es preguntarnos si dicha iniciativa debería contar con un contexto legislativo que establezca los límites a considerar en el uso de los datos de los ciudadanos. En clara evidencia de las falencias a superar en materia de seguridad, no sería extremista una conversación que considere, como todas las aplicaciones móviles, los términos de uso y compromiso por parte del desarrollador. Sobre todo, cuando sabemos de su potencial a largo plazo. Estos y otros detalles son de vital importancia para convertirnos en un hito en materia digital. Como dije más arriba: posiblemente no conocemos la dimensión que tiene la iniciativa y lo que pudiese significar en muchos aspectos. Los proyectos de esta índole tienen la capacidad de generar cambios históricos, para bien o para mal. Un ejemplo negativo es en lo que se convirtió la aplicación desarrollada en Venezuela.
“Yo soy RD” vino para quedarse y trastornar los métodos utilizados hasta el momento. Por el momento se trata de una primera fase en básico. Poco que elogiar, no más aplaudir la disposición. A largo plazo, pudiésemos estar viendo la herramienta que acabaría con la burocracia de nuestro país. Posiblemente, estemos en frente de una iniciativa capaz de contribuir a la baja en el flujo de los civiles hacia los servicios públicos. Y por qué no, una herramienta que contribuiría como canal de comunicación entre el estado y la ciudadanía. Denuncias por abusos de poder; denuncias en irresponsabilidad en materia de servicios; canal de denuncia por parte de los lideres de comunidad; una aplicación que funcionaria para desplazar información pertinente por parte del estado, como de repente el anuncio de un estado de emergencia a manera de mensaje masivo; reportes de caos o apagones por tendidos eléctricos en el suelo; denuncias de boicot ciudadano; reporte de falta de recogida de basura.
En definitiva, hoy damos un avance hacia el futuro con buenas expectativas. Esperemos estar al frente de una revolución digital en la República Dominicana. Y como he dicho, esperemos que nuestras autoridades conozcan la importancia de esta iniciativa. Esperemos que sepan lo que tienen en las manos, ya que, con el criterio preciso, convertiríamos a nuestro país en un modelo regional en materia de una comunicación clara y directa entre ciudadano y estado. La mejor de las suertes para este proyecto.
Por Jabes Ramírez