ENVÍA TUS DENUNCIAS 829-917-7231 / 809-866-3480
31 de diciembre 2025
logo
OpiniónIscander SantanaIscander Santana

¿Y si Noriega no fue lo que se nos dijo?

COMPARTIR:

Una advertencia desde el Caribe sobre hegemonía, narrativas y memoria

En diciembre de 1989, Estados Unidos invadió Panamá bajo la «Operación Causa Justa», capturando al general Manuel Noriega y presentándolo como narco-dictador. Fue juzgado en Miami, condenado por narcotráfico y convertido en símbolo de la lucha contra el crimen transnacional. Pero ¿y si Noriega no fue lo que se nos dijo? ¿Y si su caída fue menos judicial que geopolítica?

Hoy el Caribe vuelve a temblar. El presidente Donald Trump intensifica su retórica contra Venezuela, despliega tropas y confronta al presidente colombiano Gustavo Petro. La amenaza de intervención militar ya no es hipótesis remota sino posibilidad latente. En este contexto, el caso Noriega resurge como advertencia.

Construir el enemigo para legitimar la invasión

Noriega fue durante años colaborador de la CIA. Su relación con Washington se rompió cuando dejó de ser útil, incómodo para los intereses estadounidenses sobre el Canal de Panamá. Las pruebas de narcotráfico que lo condenaron nunca fueron verificadas por organismos multilaterales como la ONU. No hubo aval internacional para la invasión. No hubo proceso judicial panameño. Solo una narrativa hegemónica, construida y difundida por medios estadounidenses, que justificó la ocupación y la reconfiguración del poder en Panamá.

La invasión de Irak en 2003 siguió el mismo patrón: se justificó con armas de destrucción masiva que nunca aparecieron. Primero se construye el enemigo, luego se legitima la intervención.

El Caribe como tablero estratégico

Venezuela, con sus reservas petroleras y alianzas con China, Rusia e Irán, representa un desafío a la hegemonía estadounidense. La narrativa ya está en marcha: narcotráfico, terrorismo, autoritarismo. Se despliegan tropas, se autorizan operaciones encubiertas, se presiona diplomáticamente. ¿Estamos ante una reedición del caso Noriega?

Cuestionar el relato, no asumir la versión imperial

No se trata de reivindicar a Noriega sino de cuestionar el relato. ¿Fue realmente capo del narcotráfico o chivo expiatorio de una estrategia imperial? ¿Qué pruebas verificadas existen más allá de tribunales estadounidenses? ¿Por qué se ignoró el derecho internacional?

Estas preguntas no buscan absolver sino despertar. Porque si nos engañaron con Noriega, podrían estar haciéndolo de nuevo. Y si el Caribe vuelve a ser escenario de intervención, será bajo una narrativa cuidadosamente construida, como siempre.

La historia no se repite, pero rima

Hoy más que nunca necesitamos pensamiento crítico, memoria histórica y soberanía narrativa. El próximo Noriega podría estar en Caracas, Bogotá o cualquier rincón del Caribe. Si no cuestionamos el relato, volveremos a ser espectadores de una hegemonía que se disfraza de justicia.


Por Iscander Santana
Zürich, Suiza

Comenta