EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.– El magistrado Wilson Camacho sostuvo que la corrupción plantea interrogantes urgentes sobre su impacto económico y social, y afirmó que vivir en una sociedad libre de este flagelo debe asumirse como un derecho humano fundamental.
A través de un mensaje publicado en X, Camacho llamó a reflexionar sobre el verdadero costo de la corrupción, al cuestionar cuánto cuesta, qué implica perseguirla, cuántas víctimas deja y cómo afecta de manera directa la vida de las personas.
Las declaraciones del magistrado se producen a pocos días de la puesta en marcha de la operación Cobra, un caso que investiga el presunto desfalco en el Seguro Nacional de Salud (SeNaSa), por el cual el Ministerio Público ha presentado acusaciones contra al menos 10 personas, entre ellas su exdirector Santiago Hazim.
En este proceso, a los imputados ya les fueron dictadas medidas de coerción, como parte de las investigaciones que buscan determinar responsabilidades penales en el manejo de fondos públicos de la entidad.
Camacho enfatizó que la corrupción no es un fenómeno abstracto, sino una práctica que debilita las instituciones, afecta la prestación de servicios esenciales y profundiza las desigualdades sociales.
“Vivir libres de corrupción debe considerarse un derecho humano, tan esencial como vivir sin violencia y en un ambiente sano”, expresó, al subrayar la importancia de fortalecer el Estado de derecho y los mecanismos de persecución de este tipo de delitos.
Sus declaraciones se suman al debate nacional sobre la transparencia, la rendición de cuentas y el combate a la corrupción administrativa, temas que han cobrado mayor relevancia a raíz de recientes casos judiciales de alto perfil.




