EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- Los psiquiatras Francis Báez y José López Mena, indicaron este martes que la bipolaridad es una enfermedad crónica donde el estado de ánimo de la persona se encuentra fluctuando entre los polos de la manía y de la tristeza o padeciendo de depresión de una forma anormal.
“El gran reto para los especialistas de salud mental es lograr que los pacientes con diagnósticos de bipolaridad logren estar completamente en eutimia, que es una línea de estabilidad, y no estén fluctuando entre la manía y la tristeza”, indicó López.
Báez aclaró que el trastorno bipolar tiene “una identidad muy diferente a lo que es un cambio de humor en una persona que no padece la enfermedad, además, el paciente puede tener alucinaciones, ideas delirantes de daño y volverse agresivo, aunque vuelve a su estado normal”.
Báez y López emitieron sus comentarios durante una entrevista realizada por los periodistas Luis Brito y Enrique Mota, en el programa El Nuevo Diario AM, el cual se transmite en la plataforma digital de El Nuevo Diario TV.
(Ver entrevista a partir del minuto 01:03:23).
López explicó que las personas con este diagnóstico padecen de esto toda su vida, pero pueden ser completamente funcionales si llevan el tratamiento adecuado y reconocen cuáles son sus signos y síntomas.
“Es una enfermedad en la que las personas son funcionales y hacen su vida normal, y siempre y cuando lleven su tratamiento, las recaídas se espacian o pueden ser nulas”, afirmó López.
Asimismo, expresó que la ciencia aún no ha identificado un gen específico que herede la enfermedad, pero dijo que “sí han podido ver que personas que tienen este diagnóstico, sus familiares tienden a tener la enfermedad”.
El psiquiara advirtió que los signos y síntomas dependen del polo en que se encuentre el paciente y si empieza con un trastorno depresivo, pues la persona denotará tristeza, anhedonia y puede padecer insomnio o insomnio.
“Si empieza con la manía, la persona siente mucho deseo de hacer las cosas, puede tener pensamientos que se despeguen de la realidad y cuando se habla con ellos, se puede notar que hablan ciertas incoherencias”, acotó López.
De su parte, Báez indicó que “una fase maníaca es donde tú estás en el extremo, acelerado, hablando mucho, moviéndote mucho, con una energía sobrenatural y lo contrario es cuando está en la depresión, donde pueden llegar hasta quitarse la vida”.
Báez resaltó que los trastornos de estado de ánimo ocupan alrededor de un 65% de las consultas de psiquiatría que se hacen en los hospitales del país, y de ese porcentaje los casos de bipolaridad ocupan entre un 25% y un 30%.
En ese sentido, señaló que debido a la pandemia del coronavirus los pacientes con trastornos mentales han sufrido descompensaciones y entre ellos se encuentran las personas con bipolaridad, quienes han presentado muchas crisis durante el tiempo de confinamiento.
En tanto, López recomendó a las personas que han tenido recaídas a que no abandonen el tratamiento, y si hay algún efecto adverso debido a algún medicamento, que lo informen para que sus médicos les cambien el procedimiento y puedan seguir llevando su vida de forma normal.
Indicó que el Servicio Nacional de Salud (SNS) se ha encargado de que las unidades de atención primaria tengan los servicios de salud mental necesarios, y que en las boticas populares se encuentren los medicamentos que se usan para este tipo de trastorno.
También señaló que en el Centro de Rehabilitación Psicosocial y Desarrollo Humano (RESIDE), donde labora, se brinda un servicio completamente gratuito y trata la patología desde toda su perspectiva biológica y psicológica.
