Por: Nuriely García
EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- El diseñador de moda internacional Dominick Liariano consideró que el artista que “proyecta pobreza, vende pobreza”, y es por eso que a su entender estos deben reflejar una imagen que vaya acorde con su crecimiento y que venda su marca personal como un proyecto de vida, asegurando que el público no quiere consumir este tipo de exponentes.
“Cuando un artista proyecta pobreza, pobreza vende, porque desafortunadamente el público no quiere ver un artista proyectando pobreza, un artista lo primero que tiene que hacer es cuidar su imagen porque esa es su marca”, expresó.
Liriano externó estas declaraciones en una entrevista realizada por Krismeli Brito Padilla en el programa “Con la Dra. Controversia”, el cual es transmitido por la plataforma digital de El Nuevo Diario TV.
(Ver declaraciones a partir del minuto 11:32).
Aseguró que los fanáticos no siguen a alguien que aparenta ser o tener menos que ellos, indicando que los mismos deben crear una imagen que vaya acorde con su vida de artista que los represente.
“El mal vestir, te hacen videos en lugares que lo que se aprecia es la pobreza, es que el artista vive de un fantameo y de una fantasía, y eso es lo que vende al público y el público eso es lo que quiere ver, el público no quiere ver un ruyio”, insistió.
En ese sentido, recomendó a los exponentes de la música grabar sus temas con buena calidad, tras manifestar que cuando una carrera empieza de manera “mediocre” de esa misma forma termina, e indicó que debido a esto es mejor crear trabajos con calidad.
“El problema que tienen es que quieren pagar 2,000 pesos para grabar un tema de mala calidad que pagar 10,000 por un tema de buena calidad, si usted no tiene esa cantidad de dinero vaya ahorrando y haga un producto bueno, algo que se pueda vender, no un producto mediocre, porque si empiezas mediocre, mediocre terminas”, consideró.
Asimismo, sostuvo que la clave del éxito de un artista está en la programación y el buen manejo de sus acciones, e hizo énfasis en que muchas veces el deseo de superación es lo que traiciona a los artistas haciéndolos lanzar productos de manera apresurada, y muchas veces esto afecta la calidad de sus trabajos.
