Por: Creiddy Peńa.
EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- El psicólogo clínico y encargado de la Fundación Dominicana de Autismo, Heisenberg Drullard, criticó a los centros educativos, tanto públicos como privados, que podrían estar vendiendo un programa escolar alegadamente “inclusivo” sin ser realmente cierto.
“La inclusión es un tema muy complejo y se está usando para vender a nivel privado y público, venden el esquema de que son una escuela o colegio inclusivo, pero cuando se va a la realidad es simplemente que aceptan al niño”, manifestó.
Drullard emitió sus declaraciones en una entrevista realizada por los comunicadores Priyanka Rodríguez y Enrique “Tuto” Mota, en el programa El Nuevo Diario en la Noche, el cual se transmite en la plataforma digital de El Nuevo Diario TV.
(Ver entrevista a partir del minuto 21:25).
El terapeuta definió la “inclusión escolar” como un término que está de moda para adornar unos procesos educativos que no hacen referencia a la palabra en sí, y dijo que los centros escolares acuñan en sus programas la inclusión escolar pero sin implementar realmente los debidos protocolos para que los niños con discapacidades se desarrollen, dentro del debido entorno, como cualquier otra persona sana.
“El objetivo de la inclusión no solo es que se dé un trato especial a las personas, tampoco que sean aislados, sino que se creen las estrategias y estructuras para que en su proceso pueda integrarse con los demás”, expresó.
En ese sentido, explicó que dicha situación es la que sucede dentro de las escuelas normalmente, y detalló que hay otros tipos de trastornos que son las afecciones psicosociales, muchas veces no determinadas como trastornos físicos.
Asimismo, externó que el autismo es la discapacidad intelectual o el déficit de atención que no se puede percibir a simple vista en los niños .
“Por ejemplo, si un niño con una discapacidad auditiva se introduce en un curso con otros 40 estudiantes y se pone ahí, muchos ven eso como inclusión, porque se le está permitiendo lo mismo que a todos, supuestamente está recibiendo educación, pero cuando el maestro se para a hablar, ese niño no escucha ni sabe leer los labios”, planteó.
