Paz para la República Dominicana — En memoria de la tragedia del Jet Set
Dicen que todo va a estar bien.
Y a veces lo único que uno necesita es eso: que alguien lo diga. Que te abracen con palabras, que te sostengan con fe, que te repitan suave, como quien canta a un niño dormido: “todo va a estar bien”.
Lo que ocurrió en el Jet Set no tiene sentido. No hay forma de explicarlo sin que duela. Era una noche cualquiera. Una noche para desconectarse, para cantar, para abrazarse entre amigos, para olvidar por un rato las cargas del día. Pero de repente, la música se convirtió en gritos, el techo se vino abajo, y todo cambió.
No eran cifras. Eran personas. Eras tú, era yo, era cualquiera. Gente que salió de casa sin saber que no volvería. Y por eso duele tanto. Porque no lo vimos venir. Porque no sabemos cómo seguir.
Pero aquí estamos. Rotos, pero vivos. Cansados, pero creyendo. Porque la esperanza no muere cuando la alimentas con amor. Y en medio del polvo, de las ruinas, de los “por qué” sin respuesta, hay algo que todavía se puede escuchar: esa canción que no suena en la radio, pero que late en el corazón.
*»Todo va a estar bien, todo va a estar bien. Dios tiene el control, nunca ha perdido el control.»*
(🎶 Todo va a estar bien, Barak)
Tal vez no lo entendamos ahora. Tal vez no podamos ponerle nombre a tanto dolor. Pero sí podemos acompañarnos. Sí podemos abrazarnos. Sí podemos prometer que no vamos a dejar que esto se olvide. Que los nombres, los abrazos que faltan, los bailes que no se terminaron… no quedarán en silencio.
Este no es un mensaje de consuelo vacío. Es un acto de amor. Es un recordatorio de que, incluso en medio de la pérdida, hay algo que nos sostiene.
Y sí, pedimos paz. Pero también pedimos justicia. Porque el consuelo no puede llegar mientras haya impunidad. Porque las vidas no pueden volver, pero la verdad sí puede salir a la luz. Porque no puede ser que los responsables duerman tranquilos mientras tantas familias ni siquiera han podido enterrar a los suyos.
Paz. Para los que se fueron. Para los que se quedaron. Para los que siguen luchando por justicia. Paz, aunque duela. Paz, aunque tiemble.
Respira. Agárrate fuerte. Llora, si tienes que llorar.
Y cuando no sepas qué hacer, escucha esa canción bajito.
Todo va a estar bien.