La información sobre la posibilidad de que patrullas civiles armadas sean creadas a los fines de proteger las empresas y al personal de los productores de Moca y Lecey al Medio de Santiago, evidencia claramente la inseguridad que en los actuales momentos vive el país, sometido a una serie actos delincuenciales a nivel de toda la geografía nacional.
Tenemos que combatir el crimen y el narcotráfico con como una urgencia nacional, para todo lo cual se necesita la voluntad del Gobierno aportando los recursos y realizando los cambios que fueran necesario en favor de la seguridad nacional.
En artículos anteriores me he referido al tema bajo la propuesta de una policía civil en la reserva, formada por líderes de los barrios, comerciales y veteranos de las instituciones castrenses, para ayudar con la denuncia, ubicación y apresamiento de las bandas integradas en muchos casos por policías, civiles y militares, las cuales tienen en zozobra a la población.
Lo primero que el presidente Danilo Medina tiene que hacer este 27 de febrero es realizar los cambios tradicionales en el Gabinete, incluyendo la Policía Nacional, el Ministerio de Defensa, la Dirección Nacional de Control de Drogas y otras instituciones que luchan contra la delincuencia.
Resultan urgente estas medidas, para proteger a la población de la delincuencia, las drogas, el juego de azar, y de los policías y guardias corruptos.
Muchos ciudadanos tenemos que tomar serias medidas de precaución para transitar en las calles, sea a pie o en vehículos de motor, entre ellas, en el caso de las mujeres, no usar carteras; no podemos transitar las calles en horas de la noche y andar con los bolsillos afuera para que desde la motocicleta o el vehículo en que transiten los delincuentes puedan observar que tu no lleva nada.
No es un secreto, que de ambos flagelos, el juego legalizado y el consumo y tráfico de las drogas, se deriva el peor flagelo que arrastra el balance más exorbitante raterismo sicarito, entre otros grandes males del crimen organizado.
En este caso, el presidente mejor valorado que hemos tenido en toda nuestra historia republicana nuestro país, licenciado Danilo Medina, tiene que aprestar el pulso y enfrentar esta difícil y complicada situación, caiga quien caiga.
Se dé que hablo y tengo suficiente experiencia, por haber sido miembro de las Fuerzas Armadas, de la Policía Nacional, y asesor de prensa de la DNCD, por lo cual le aceptaría mi designación, como sucedió en la revolución de abril del 1965, al frente de un grupo de asesores civiles del Gobierno para combatir las drogas, el crimen y la delincuencia, conjuntamente con el Movimiento Cultural y Deportivo Antidrogas (MCDA), el cual usted conoce y que me honro en presidir.
Por José Guerrero