EL NUEVO DIARIO, INTERNACIONAL.- Hace solo unos días salió a relucir en los medios internacionales la fuga de gas que se produjo en varios gasoductos de Nord Stream en la zona del mar Báltico perteneciente a Dinamarca, y otras dos en la zona perteneciente a Suecia.
Dada la situación las autoridades de seguridad alemanas temen que las tres tuberías de Nord Stream 1 y Nord Stream 2 queden fuera de servicio para siempre.
Tras los supuestos actos de sabotaje sufridos por los gasoductos, la Policía Federal alemana reforzará el control de las aguas territoriales del país y la vigilancia de las infraestructuras críticas.
Según la prensa local, los gasoductos no se reparan rápidamente ya que una gran cantidad de agua salada ingresará a las tuberías y provocará la corrosión de estas.
Expertos y círculos gubernamentales creen que debido a la complejidad del supuesto ataque, solo podría haber sido llevado a cabo por un actor estatal, como por ejemplo Estados Unidos.
Pero pese a la gravedad de las fugas, todavía se mantiene la esperanza de reparación.