La pregunta es obligada. No es posible que sigamos teniendo tantos accidentes en la zona turística del Este. Específicamente, en Bávaro y Punta Cana, en la provincia Altagracia, nuestra principal zona turística.
Casos trágicos que lucen sustentados en la imprudencia y la irresponsabilidad de los conductores. Y es obvio que en la falta de control de las autoridades responsables del tránsito.
Seguir con ese ritmo que llevamos corremos el riesgo de espantar a los turistas, influidos por el convencimiento de que se exponen a un peligro inminente.
Nadie se anima a perseguir la tragedia, sobre todo, cuando decide venir a disfrutar de las bondades del país y de su gente. Debemos reaccionar para parar eso.