La economía mundial está sufriendo unas fluctuaciones en cuanto el precio de las divisas en determinadas zonas. Especial importancia está teniendo en algunos países con monedas con un poder muy inferior al dólar o al euro, y que ven como se resiente su tipo de cambio con respecto a estos dos gigantes que mueven el mundo.
Costa Rica lleva a la máxima expresión esta realidad con el tipo de cambio entre el colón y la moneda norteamericana. El dólar en Costa Rica se encuentra en máximos niveles en estos momentos, y todos los mercados de futuro indican que esta tendencia seguirá siendo continuada en el corto plazo.
Las expectativas generadas al principio de curso sobre el mercado monetario en el país de Centroamérica se quedaron cortas. La evolución del tipo de cambio en Costa Rica es claramente alcista, por lo que no es recomendable llevar a cabo operaciones de importación, puesto que los precios se encarecerían notablemente. Se espera que hasta al menos el verano 2022 este crecimiento siga siendo una realidad para lamento de todos los comerciantes que ven como sus mercaderías compradas al exterior se han disparado, con lo que eso conlleva para la economía diaria de millones de ticos.
Si hay un lado positivo de esta devaluación del colón con respecto al dólar americano, es la oportunidad que se abre en el extranjero para las manufacturas costarricenses. Es hora de que las exportaciones empiecen a tirar de la economía en todo su conjunto, ya que este valor de la moneda patria permite a compradores e inversores de fuera de las fronteras adquirir un mayor volumen de bienes y servicios por el mismo precio que cursos atrás. Es indudable que la economía costarricense es más competitiva fuera de las fronteras del país, pero no se debe pasar por alto la escasa tradición manufacturera del país. A lo largo de la historia se ha demostrado que, en una nación importadora, por lo que cambiar esa naturaleza no es flor de un día.
El turismo extranjero también se ve beneficiado con esta bajada del colón con respecto a la moneda norteamericana. Los visitantes que llegue a Costa Rica comprobarán como los precios son muy bajos con respecto a sus países de origen, pudiendo realizar un mayor desembolso per cápita que palie en parte la complicada situación económica de millones de ticos.
La evolución de este tipo de cambio no es algo ajeno que solo ocurra en estos momentos en Costa Rica. Otros países vecinos también se encuentran en esta tesitura de cambio, que hace ver el futuro con cierta incertidumbre. Los países extranjeros, especialmente europeos y Estados Unidos, tendrán una situación predominante cada vez más ante estas naciones, haciendo que su supremacía crezca día a día.
Sin duda una mala noticia para algunas zonas del planeta, que aun no se han recuperado de un crisis económica que ya se alarga muchos años más de lo previsto, y que impide a buena parte de su sociedad tener planes de futuro.
