EL NUEVO DIARIO, CRACOVIA, POLONIA.- El ministro polaco de Asuntos Exteriores, Zbigniew Rau, cargó este viernes contra el gasoducto ruso Nord Stream 2 y recordó la demanda polaca de reparaciones de guerra a Alemania durante la primera visita oficial de su homóloga alemana, Annalena Baerbock.
Rau repasó, en una comparecencia ante la prensa, los contenciosos que Varsovia mantiene con Berlín y destacó que su Gobierno «está dispuesto a fortalecer el diálogo estratégico con Alemania, sobre todo cuando hay temas en los que las diferencias son significativas».
El ministro polaco hizo continuas referencias al «nefasto proyecto» del gasoducto Nord Stream 2, que transportará gas a ruso a Europa occidental y está controlado por el gigante Gazprom.
En esta línea, recordó que «la política de los anteriores gobiernos alemanes también amenazó la paz en Europa, al adoptar una política de cooperación con Rusia desastrosa -como ha quedado patente-, basada exclusivamente en los beneficios económicos».
Rau subrayó que el gasoducto ha sido denunciado por Polonia desde 2004 «como algo perjudicial para nuestras relaciones mutuas, para la solidaridad europea, para las relaciones aliadas en Europa, para la credibilidad de Alemania, y finalmente para la seguridad y la integridad territorial de Ucrania».
El mes pasado, la Agencia Federal de Redes de Alemania anunció la paralización del proceso de certificación del gasoducto de forma provisional, hasta que el operador adopte una forma legal conforme al derecho alemán.
Rau también sacó a colación el contencioso de las reparaciones de guerra, una vieja reivindicación del Gobierno polaco, y reclamó «volver a las conversaciones sobre la devolución de los bienes culturales robados por Alemania y hablar sobre compensaciones y reparaciones».
En cuanto a la influencia alemana dentro de la Unión Europea, el ministro polaco aclaró que en su opinión «Polonia nunca aceptará el retorno al paradigma de las esferas de influencia, que con demasiada frecuencia en la historia de Europa ha sido fuente de guerras y causa de sufrimiento».
La ministra alemana de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock, que se entrevistó este viernes con el presidente de Polonia, Andrzej Duda, antes de atender al ministro Rau, en su primera visita oficial, se reunió también con organizaciones de la sociedad civil y con el Defensor del Pueblo polaco.
«Alemania y Polonia comparten una amistad que no es obvia, dado el sufrimiento de los polacos durante la ocupación alemana, pero aun así hemos hablado de muchos temas, tanto de aquellos en los que estamos de acuerdo como de las cosas que nos separan», dijo Baerbock a los medios polacos.
Tras asumir el cargo esta semana, la ministra verde había advertido del peligro de permitir que «se resquebrajen los cimientos de Europa» en cuestiones de derechos humanos y Estado de derecho.
Así, conminó a Polonia a prestar ayuda humanitaria a los migrantes atrapados en la frontera con Bielorrusia, ya que no tienen la culpa de ser usados como peones en el «chantaje» a Europa por parte del presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko.
