EL NUEVO DIARIO. Paul Pierce, emblema de Boston Celtics, equipo con el que disputó sus primeras 15 temporadas en la liga, logrando además el anillo en 2008, se retirará como verde tras firmar un contrato de un año (no garantizado) con la franquicia de Massachusetts. Así se esperaba y así será.
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— Boston Celtics (@celtics) 17 de julio de 2017
“Nos sentimos honrador porque Paul Pierce ha decidido retirarse como un ‘Celtic’. Está entre los mejores Celtics. Se trata de un campeón dentro y fuera de la cancha. Le felicitamos por su carrera de Hall of Fame y esperamos ver pronto su número retirado en el TD Garden”, expresa Wyc Grousbeck, copropietario de la franquicia.
Paul Pierce, seleccionado en el puesto nº 10 del Draft de 1998, se marchó hasta un promedio de 21,8 puntos, 6 rebotes, 3,9 asistencias y 1,9 robos por partido en los 15 años que defendió la camiseta de los Celtics. En total han sido 1.102 partidos (1.099 como titular).
“Es un honor tener esta oportunidad de poder decir de nuevo que soy un Boston Celtic. La organización y la ciudad me acogieron y me hicieron uno de los suyos. No podía imaginar la posibilidad de terminar mi carrera de otra manera. Soy un ‘celtic’ para toda la vida”, señala Paul Pierce en el comunicado.
Sus récords
15 años vistiendo la misma camiseta con el ’34’ dan para mucho. Al anillo logrado como verde, Pierce suma el honor de ser el jugador con más triples anotados en la historia de los Celtics con 1.832, el que más tiros libres ha anotado con 6.434 y el que más robos ha hecho con 1.583. Además, es el segundo máximo anotador con 24.021 puntos, solo superado por los 26.395 de John Havlicek.
Un amor inesperado
Aunque la historia se ha encargado de demostrar lo contrario, los primeros instantes de Pierce como jugador de Boston no hacían presagiar un final feliz. Para empezar estaba proyectado el ser elegido en el top-5, por lo que caer hasta el puesto 10 se sintió decepcionado. Eso no fue lo peor, ya que al escuchar su nombre ligado a los Celtics directamente quedó “en shock”. No solo iba a un equipo con el que no había tenido relación alguna en las semanas previas al Draft, sino al que él mismo definía como “el equipo que odiaba mientras crecí”. Nada le detuvo. Su amor con Boston superó cualquier suspicacia inicial.
Perseverancia
Si hay algo que ha caracterizado a The Truth es su constancia para alcanzar la gloria. Dando sus primeros pasos en la NBA junto a Antoine Walker, en 2002 alcanzó las Finales de Conferencia, donde cayó contra los por entonces New Jersey Nets. Tras ese éxito llegaron años de sequía en los que entrar en playoffs era casi un imposible. Fue en 2007, con las firmas de Kevin Garnett y Ray Allen cuando todo cambió. El ‘Big Three’ de los Celtics hacía su aparición para devolver la gloria al equipo 22 años después de su último anillo. No volvieron a ser campeones, pero Pierce, a su décimo año como verde, había hecho historia.
