EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO. – La maestra del teatro, Monina Solá ha fallecido este sábado pero su legado en la actuación la convertirá en una leyenda del teatro dominicano.
Y es que esta dama de las artes escénicas dedicó su vida a las tablas siendo una disciplinada aprendiz y dedicada maestra que tuvo por generaciones a su cargo la preparación de importantes y destacados teatristas que han dejado la piel en sus presentaciones.
Con pasión, siempre se entregó. Y eso se notó en cada uno de los personajes que en sus venas impregnó, y admirando a un exquisito público que laureaba y aplaudía a esta inolvidable artista.
Gloria del teatro dominicano, una leyenda impregnada en las hojas de la historia, de la cual muchos de los que se prepararon bajo sus alas deben mantener y seguir para que su legado, de décadas no quede en el olvido.
Monina Solá deja su actuación en más de 200 obras de teatro a lo largo de más de 50 años de carrera, con un diversificado talento interpretativo adecuado para el drama, la comedia, el teatro clásico.
Nacida un 23 de mayo de 1933, hizo su debut en 1937 a la edad de cuatro años en la compañía de teatro que tenía su padre José Narciso Solá. Al cumplir los 11, trabajó con Emilio Aparicio y a los 14 perteneció al Teatro de Bellas Artes.
Su padre, que era inmigrante puertorriqueño, se radicó en San Pedro de Macorís. Era actor, músico y escritor de obras teatrales, tales como “El Intruso” y “Temblor Político”, y de quien se considera responsable de la inclinación que desarrolló la maestra hacia el teatro.
Trabajó en importantes programas de radio y televisión con grandes figuras del teatro y la escena dominicana, siendo siempre respetada y reconocida por su afable forma, disciplinado régimen y su entrega a dar lo mejor de su arte.
Solá tuvo la oportunidad de estar en la lectura dramatizada de obra “La muerte de un viajante”, de Arthur Miller, junto a Iván García Guerra, Pepito Guerra, Ernesto Báez, Amauris Pérez y Flor de Bethania Abreu, quien fue su directora.
En 2009 participó en la obra teatral “Ojalá hoy fuera ayer”, del dramaturgo Franklin Domínguez junto al elenco de actores compuesto por Salvador Pérez Martínez, Iván García, Augusto Feria, Lumy Lizardo, Carlota Carretero y Karina Noble.
Ese mismo año, el productor y director Jimmy Sierra realizó el primer documental sobre la “Historia del Teatro” en el país, en la que Solá fue invitada para ofrecer sus testimonios y opiniones junto a otros actores y actrices destacados.
También, fue distinguida en “Mujeres de éxito vestidas de esperanza” junto a Cecilia García, Nuria Piera, Emely Tueni, Socorro Castellanos, Jatnna Tavárez, Laura Castellanos, Alicia Ortega, Roxanna Reyes y Aura Celeste Fernández.
En 2008 fue inaugurado en Villa Juana el Centro Cultural Narciso González, con una sala de teatro con capacidad para 360 personas que lleva su nombre.
Monina fue reconocida y condecorada con la Orden de Duarte, Sánchez y Mella, en los grados de Caballero y Comendador. Galardonada con los premios: El Dorado, Premio Casandra, Premio ACE y El Talía de Plata.
Durante décadas estuvo casada con Luis Homero Lajara Burgos, militar y político dominicano, con quien procreó dos hijos. En un matrimonio anterior tuvo dos más. Se le consideraba familiarmente como el eje esencial de su núcleo familiar.
