En un acto que refuerza los valores de transparencia y democracia, Mónica Güicho González, reconocida líder en el ámbito jurídico y defensora de los derechos humanos, anunció este viernes, su intención de postularse como ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en las elecciones de 2025, en México.
Este paso, sin precedentes en el contexto del Poder Judicial en México, posiciona a Mónica Güicho como un ejemplo de compromiso con el fortalecimiento institucional y la rendición de cuentas en el país.
La trayectoria de Mónica Güicho González habla por sí misma. Originaria de Culiacán, Sinaloa, y egresada con Mención Honorífica de la Escuela Libre de Derecho de Sinaloa, ha dedicado su carrera a la justicia y la equidad de género, consolidándose como una figura de referencia en el ámbito jurídico.
Su desempeño como magistrada federal en el Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje y su liderazgo en la transformación digital de los juicios en el Gobierno del Distrito Federal han marcado hitos clave en la modernización del sistema judicial mexicano.
A nivel internacional, su labor como Coordinadora General en la International Association of Women Judges (IAWJ), Capítulo México, y su activa participación en la Asociación Mexicana de Impartidores de Justicia (AMIJ) han destacado su compromiso con la equidad y los derechos humanos. Más recientemente, su enfoque en la protección infantil y los derechos de las infancias en México la ha consolidado como una figura clave en temas de justicia social.
El anuncio de su candidatura llega apenas unas semanas después de que Mónica fuera galardonada con el Premio Patria en Pro de la Salud, Justicia, Economía y Bienestar, un reconocimiento otorgado durante la IV Entrega del Premio Patria 2024, por su destacada labor en la promoción de los derechos humanos y el bienestar social.
Este logro resalta la relevancia de su perfil en el ámbito nacional e internacional y refuerza su posición como una candidata que encarna los valores de integridad y visión transformadora.
La postulación de Mónica Güicho no solo es un acto de gran relevancia para México, sino también una declaración de principios en un momento en que la democracia y la transparencia son más necesarias que nunca. Su decisión de buscar un puesto en la SCJN es una invitación a replantear el compromiso de las instituciones con la ciudadanía y establece un nuevo estándar para los aspirantes al máximo tribunal del país.
