EL NUEVO DIARIO, MOSCÚ. – Los ministros de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, y China, Wang Yi, abordaron este jueves la situación en Afganistán durante una reunión al margen de la Conferencia Internacional sobre Asia Central que se celebra estos días en Uzbekistán.
«Se llevó a cabo un profundo intercambio de opiniones sobre asuntos globales y regionales de actualidad, incluida la seguridad informática internacional, la situación en Asia Central y la región de Asia-Pacífico», señala el comunicado oficial de la diplomacia rusa.
Ambos ministros «prestaron especial atención» a la situación en Afganistán y reafirmaron su disposición a «contribuir activamente al arreglo» en ese país en el marco del grupo de contacto existente entre la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) -de la que forman parte Rusia y China- y Afganistán.
Lavrov y Wang también conversaron sobre la «dinámica positiva» de las relaciones ruso-chinas y la interacción entre los dos países en organizaciones internacionales como la ONU, el G20 y los llamados BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), entre otros.
«La reunión se celebró en una atmósfera constructiva y de confianza, propia del carácter estratégico de las relaciones ruso-chinas», concluye la nota.
Los ministros de Exteriores de los ocho países de la OCS, de los que varios comparten frontera con Afganistán, recalcaron la víspera que no hay ninguna alternativa al diálogo y un proceso de paz inclusivo para resolver el conflicto en ese país centroasiático.
«Consideramos que uno de los factores más importantes a la hora de preservar y reforzar la seguridad y la estabilidad en el espacio de la OCS es la rápida solución de la situación en Afganistán», afirmaron en una declaración adoptada al término de una reunión en Dusambe los jefes de las diplomacias de Rusia, Kazajistán, Kirguistán, Uzbekistán, Tayikistán, la India, China y Pakistán.
Los Estados miembros de la alianza se mostraron especialmente preocupados por el aumento de la tensión en las provincias norteñas de Afganistán, como resultado del «fuerte incremento» de la concentración de terroristas, grupos separatistas y extremistas.
En su declaración, los ministros subrayaron la necesidad de intensificar los esfuerzos del Gobierno y el pueblo afgano encaminados a restablecer la paz, al desarrollo económico del país y a la lucha contra el terrorismo, el extremismo y los delitos relacionados con las drogas.
