EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- A partir de este lunes decenas de mozalbetes entrarán a la danza de los millones con el inicio de la zafra 2 de julio o el llamado mercado internacional del béisbol.
Marco Luciano, un paracorto capaz de generar varias herramientas en el terreno de juego, espera pactar una cifra de 2.5 millones de dólares, mientras que Orelvis Martínez, otro paracorto, estaría firmando un acuerdo que se aproxima a los US$3.5 millones.
En los últimos tres años se incrementa la presencia de jugadores firmados con bonos millonarios en julio 2 y que hoy son peloteros estables en las Grandes Ligas como Rafael Devers, Gary Sánchez, Luis Severino, Miguel Andújar, Manuel Margot, Amed Rosario y un caso con ribetes de especial como el de Juan Soto, el jovencito de apenas 19 años, que ya ocupa los principales puestos en la alineación de una franquicia tan competitiva como los Nacionales de Washington.
Lamentablemente, mucho ruido se ha hecho sobre 18 de los primeros 20 adolescentes dominicanos en el ranking de firmas para el béisbol profesional en la zafra que inicia el próximo 2 de julio, dieron positivo a sustancias prohibidas.
Una cifra escandalosa de fallas a pruebas para detectar el consumo de sustancias prohibidas está provocando que se reconsideren el 90 por ciento de los principales contratos apalabrados entre las organizaciones del béisbol organizado y niños dominicanos. El aviso fue hecho en primera instancia por el periodista Neftalí Ruiz.
“Aquí lo que podemos ponderar es el talento criollo, los programas independientes, las ligas, y eso se vislumbra con el trabajo de los desarrolladores de talentos. El resultado es esa exorbitante firma de 612 entre 2017 y 2018”, señaló Rafael Oscar Pérez, director de MLB en el país, mientras conversaba con el editor deportivo de esta redacción sobre la famosa fecha de 2 julio.
