EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- A sus 88 años de edad, Manuel Milcíades Morilla Soto camina lentamente hacia el tribunal, apoyado en el brazo de su hijo, Manuel Milcíades Morilla Gil. Su mirada, cansada y serena, refleja el agotamiento de un proceso judicial que parece “no tener fin”.
Dos veces por semana, padre e hijo recorren el mismo pasillo del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva para asistir a las extensas audiencias del caso en el que ambos están acusados de formar parte de una presunta red de corrupción liderada por exministros, que según el expediente habría desviado más de 21 mil millones de pesos del Estado.
Cada sesión es larga, casi interminable. “Kilométricas audiencias”. En los asientos de madera del tribunal, Morilla Soto permanece en silencio, con un cubreboca, escuchando durante horas argumentos legales que parecen volverse eternos.

Se les acusa de Asociación de malhechores, uso de documentos falsos, estafa, soborno y lavado de activos.
A la misma sala de audiencias asiste el exsenador de Azua, Rafael Calderón, otro de los implicado en el caso. Con más de 80 años de edad, comparte el cansancio y la incertidumbre de quien, en la etapa final de la vida, enfrenta un proceso que consume días, energía y esperanza.
También la señora Ana Linda Fernández de Paola, quien está acusada junto a su hermano Emir Fernández De Paola, es una procesada de 82 años, se le conoce un proceso judicial por separado por temas de salud.
Los hermanos son señalados de falsificación de documentaciones públicas y privadas para reclamar y recibir pagos irregulares del Estado por expropiación de terrenos.
Este alegado entrando de corrupción presuntamente fue liderado por los exministros de Hacienda, Donald Guerrero, de la Presidencial, Ramón Peralta toy de Obras Públicas y excandidato presidencial, Gonzalo Castillo.
En el Distrito Nacional, varios de los implicados en casos de corrupción pública se destacan por su edad avanzada, siendo muchos de ellos considerados envejecientes.
A lo largo de los procesos judiciales, estas personas, algunas con más de 70 u 80 años, han debido comparecer regularmente ante los tribunales, enfrentando largas audiencias y procedimientos que, en ocasiones, se prolongan por años.
Video: Manuel Milcíades Morilla Soto entra al tribunal este jueves apoyado por los brazos de su hijo




