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25 de diciembre 2025
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OpiniónLeonardo GilLeonardo Gil

Lo único permanente es el cambio  

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El cambio es la ley suprema de la política  decía Heraclito que “Lo único permanente es el cambio”.

La política dominicana vive en constante transformación. Cada ciclo electoral, cada coyuntura social y cada crisis reconfiguran las reglas del juego. La historia reciente del país lo confirma: de las estructuras autoritarias del siglo XX, a la consolidación democrática, pasando por la irrupción de la era digital y la transparencia como exigencia ciudadana.

La cuestión en este juego es adaptarse o desaparecer “No es la especie más fuerte la que sobrevive… sino la que mejor se adapta al cambio”  dijo Charles Darwin.  La irrupción de las redes sociales, de una opinión pública más crítica y el escrutinio internacional han obligado a los líderes dominicanos a renovar su forma de comunicar y gobernar. Las figuras que se aferran a viejas fórmulas se diluyen; las que entienden las nuevas reglas, se fortalecen.

Por eso el  cambio se mantiene como promesa electoral “Mejorar es cambiar; ser perfecto es cambiar a menudo”  Winston Churchill.  En la República Dominicana, el cambio no solo es un fenómeno, también es un relato político. Ha sido la promesa que ha impulsado alternancias y ha servido como arma para movilizar el voto. Sin embargo, la ciudadanía ya distingue entre cambios reales y maquillajes políticos, castigando la incoherencia.

Gobernar en tiempos de inestabilidad  requiere sentido común “La mejor manera de predecir el futuro es crearlo” – Peter Drucker.  Gobernar hoy exige flexibilidad, capacidad de anticipar crisis y modernizar instituciones. En un país donde la agenda pública puede alterarse en horas, la rigidez es un lujo que ningún líder puede permitirse.

En la política dominicana, el cambio no es una amenaza: es la condición para existir. Quien lo entienda, sobrevive. Quien lo lidere, trasciende. “En este modelo, quien no se reinventa, se extingue; y quien entiende el cambio, se convierte en su arquitecto.

 

Por Leonardo Gil, Consultor en comunicación política y de gobierno.

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