EL NUEVO DIARIO, EEUU.- El cantante Justin Bieber respondió con ironía a una publicación realizada por su madre, Pattie Mallette, donde pedía libertad, fuerza, claridad y sanidad para el intérprete de «Sorry».
Pattie Mallette, conocida por su profunda fe cristiana, compartió la oración en su cuenta de Instagram junto a varias fotografías de Bieber agregando que: “toda cadena de miedo, confusión, pesadez y dolor sea rota en el nombre de Jesús”.
En la plegaría, Pattie imploró al Espíritu Santo que sane cada herida de su corazón de su hijo y restaure todo lo que ha sido robado.
“Espíritu Santo, rodéalo con VERDAD, LUZ y PROTECCIÓN. SANA CADA HERIDA en su corazón, mente y cuerpo, visible e invisible, restaura lo que ha sido robado y cúbrelo con INTEGRIDAD”, escribió Mallette.
La madre del artista continuó su oración pidiendo que su hijo “sea un testimonio audaz del poder, amor y gracia sanadora de Dios”.
La madre del intérprete de «Baby», no explicó el motivo detrás de su mensaje, publicado el 22 de septiembre, despertando especulaciones entre los fanáticos que interpretaron el texto como una señal de que Justin podría estar atravesando un momento personal difícil.
Sin embargo, dos semanas después, el cantante decidió pronunciarse, restándole importancia al mensaje de su progenitora: “Lo único de lo que necesito sanar es de mi dedo meñique torcido por jugar ping pong”.
Su respuesta, breve y sarcástica, contrastó con la intensidad del mensaje de Mallette. Aunque algunos la interpretaron como una manera de restarle dramatismo a la situación, otros vieron en ella el reflejo del estilo relajado con el que el artista suele manejar la atención mediática.
Pese a su tono burlón, Bieber ha dejado en claro que la fe sigue siendo una parte central de su vida.
Dos días antes de la publicación de su madre, el cantante compartió en Instagram un mensaje sobre cómo la religión lo ayuda a sobrellevar la fama y los desafíos personales: “Jesús enseña que nuestro esfuerzo es simplemente una respuesta al regalo de la vida y del perdón”, escribió el 20 de septiembre. “Jesús se convierte en el premio. Y el crecimiento se vuelve algo que deseas por la gracia que hemos recibido”.
El artista canadiense, de 31 años, ha hecho de su espiritualidad un eje constante en su carrera y en su música. De hecho, en su más reciente álbum «Swag II», incluye canciones como “Story of God” y “Everything Hallelujah”, en las que explora temas de redención, propósito y fe.
Asimismo el videoclip de la canción “Speed Demon”, aparece vistiendo una camiseta con el mensaje Pray for Me (“Reza por mí”).




