EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- El comunicador y activista social Jaime Rincón afirmó este jueves que es una «burla» al pueblo dominicano que el Gobierno use el dinero de los contribuyentes para construir cuatro hospitales en el lado haitiano de la frontera, debido a que los hospitales dominicanos están «destartalados» y esa iniciativa responde a un «chantaje» de las grandes potencias.
Asimismo, afirmó que hay un plan orquestado para que el país asuma los problemas de Haití, y aseguró que el presidente Danilo Medina y el canciller Miguel Vargas aceptan los chantajes internacionales para que el país pueda recibir préstamos y lograr un puesto en la ONU. Así lo expresó en «El Nuevo Diario en la Tarde», programa que conduce en «El Nuevo Diario TV».
«Es una barbaridad, es un abuso que con el dinero de los dominicanos se construyan cuatro hospitales en Haití. República Dominicana tiene precariedades; aquí no hay un solo problema básico resuelto. Los haitianos tienen que resolver ellos mismos sus problemas, con la ayuda de Francia, Cánada y Estados Unidos», dijo.
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Rincón sostuvo que «la oligarquía rancia de Haití no quiere saber nada de nosotros, ni quiere aceptar nada de República Dominicana, y nosotros tenemos que andar suplicándole».
Además, señaló que en el país no hay discriminación ni racismo contra los haitianos. «Es un abuso constante contra la República Dominicana, y no tenemos políticos con pantalones puestos. Son traidores que han vendido la soberanía. Aquí no hay racismo nada: lo que hay es un grupo de dominicanos que nos duele lo que está pasando», apuntó.
Rincón destacó el caso del hospital Darío Contreras, donde no hay una silla de ruedas para los pacientes. «Aquí, si su hijo se enferma con una enfermedad catastrófica, usted debe mendigar porque la salud no está garantizada», comentó.
«Nosotros no podemos aceptar, bajo ninguna circunstancia, construirle hospitales a Haití; ellos que construyan sus hospitales, porque nosotros aquí tenemos hospitales que lamentablemente no tienen nada. Tenemos muchísimas debilidades y muchísimas carencias», insistió.
