EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- De cumplirse los pronósticos de la Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET) sobre la trayectoria del huracán Irma, de categoría cinco, que impactaría la parte norte y noreste de nuestro territorio, esto traería importantes consecuencias económicas profundizando el déficit fiscal existente.
A decir de los expertos el huracán Irma es el más peligroso de la historia en el Océano Atlántico, potencialmente con efectos catastróficos si se cumplen los pronósticos.
Las zonas de incidencia de Irma estarían afectando negativamente tanto el sector agropecuario, como el sector turístico del país, de hecho ya los hoteles de la región de Punta Cana y Bávaro han ejecutado protocolos de seguridad y prevención.
En el sector agropecuario las fuertes lluvias que estarán cubriendo la parte norte y en los sistema montañosos, podrán provocar inundaciones y perdidas de cosechas e infraestructuras agro empresarial, así como las vías de acopio y distribución de los productos del campo, lo que conllevará necesariamente un incremento del gasto a partir de las medidas de asistencia que se establezcan.
Pese a que este fenómeno de la categoría de Irma no es recurrente en la República Dominicana, la nación cuenta con mecanismos para la prevención de daños por fenómenos naturales y gestión de riesgos. En ocasiones anteriores de tormentas tropicales que han causado daños importantes, las autoridades del área económica han recurrido a la especialización puntual de fondos, sumado a las ayudas de organismos internacionales y la solidaridad de países amigos.
Dependiendo de los daños que este fenómeno pueda causar en las comunidades, a las familias, la infraestructura vial, las empresas, se determinaría su costo, no obstante, si el Gobierno no cuenta con los recursos líquidos necesarios para una respuesta rápida, una vez más tendrá que tomar prestado a través de los mecanismos que tiene a su disposición, incluyendo créditos contingentes o la emisión de bonos, incrementado el nivel de endeudamiento.
Está demostrado que las recaudaciones fiscales no son suficientes para cubrir el gasto, es decir que el fenómeno Irma podría afectar la economía en sectores muy sensibles, que de cumplirse las proyecciones de vientos y lluvias frenaría aún más el lento crecimiento económico del 2017.
