EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- Es necesario revisar la enseñanza de la historia dominicana y contar los hechos históricos tal y como sucedieron, con total veracidad, para construir una conciencia de ciudadanía y consolidar la identidad nacional, en base a ideales de libertad, soberanía y democracia.
Así concluyeron los historiadores Sócrates Suazo y Leonel Martínez en el programa «Análisis y Síntesis», por «El Nuevo Diario TV», donde afirmaron que el «descubrimiento» de América es «el acontecimiento más importante y trascendente de la historia de la humanidad», y dijeron que fue un empresa colonizadora que dejó resultados positivos.
Plantearon, también, que la enseñanza de la historia ha sido distorsionada, pues a los alumnos se les oculta la verdad de los hechos.
Ambos juzgaron como un «error» ver la colonización como un proceso totalmente negativo, pues el «Descubrimiento» cambió la historia del curso humano, superó las barreras espaciales y dio paso a la civilización del Nuevo Mundo. Además, según ellos, los imperios se construyen sobre la explotación de otros pueblos, y romanos, franceses e ingleses hicieron lo mismo que los españoles. Sin embargo, reconocieron los desmanes perpetrados por los colonizadores, incluyendo el exterminio de la población aborigen y la masacre de Jaragua.
«A lo largo del tiempo le hemos ocultado una interpretación veraz de los hechos a la población: por eso no hemos creado conciencia de identidad en la ciudadanía y, en consecuencia, desembocamos en la cibernética y la mundialización, con pobres muchachos que no saben de dónde vienen ni para dónde van. Un alzheimer social, con un daño tremendo en lo ético, en lo moral. Carecemos de políticas de Estado que se estructuren para perseguir la gran meta de que la nación dominicana permanezca en el tiempo», expuso Suazo.
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Para ambos, la isla de Santo Domingo fue el epicentro de la civilización americana, y por eso las primicias coloniales deben ser conservadas e impulsadas para constituir atractivos turísticos. Para tal fin propusieron reconstruir la ruta de la esclavitud, así como atesorar el ejemplo de Enriquillo y el sermón de fray Antón de Montesinos, en defensa de los aborígenes. Los dos están conscientes de que aquí nació América, y reivindican la herencia cultural de aborígenes y africanos.
Martínez se refirió a lo que califica como las «mentiras del Descubrimiento». Negó que presidiarios fueran sacados de la cárcel para hacer el viaje; que la reina empeñara sus joyas para financiar la aventura; que la expedición saliera del puerto de Palos de Moguer, y que Colón regresara con las tres carabelas después del primer viaje.
Aseguró, además, que los hermanos Martín Alonzo Pinzón y Vicente Yánez Pinzón fueron los financiadores del viaje, y que antes del «Descubrimiento», Colón viajó varias veces a tierras americanas y fue un sobreviviente, pues se le hundió una embarcación y tuvo que nadar kilómetros.
«La historia debe servir para transformar el presente», concluyó.
