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26 de abril 2024
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OpiniónJose GuerreroJose Guerrero

Evitemos las actividades masivas

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Al aproximarse el próximo año 2022, nos complace felicitar a todos los dominicanos que al igual que nosotros han podido sobrevivir a la dura prueba de la pandemia covid 19, con la ayuda de Dios y de un equipo de gobierno excelente, encabezado por nuestro primer mandatario Luis Abinader y su honorable y distinguida esposa, nuestra Primera Dama, Raquel Arbaje Soni, quienes vienen realizando un excelente trabajo al frente del presente Gobierno.

A pesar de los esfuerzos de nuestras autoridades que respecto a la pandemia nos han vacunado hasta por tres veces y sometido a un protocolo de distanciamiento, seguimos enfrentando un alto riesgo de contaminación por las grandes concentraciones multitudinarias para la fecha en fiestas y con nuestra presencia en las actividades deportivas.

En tanto, tenemos que ser más prudentes y cautelosos ahora y en él  años que se avecina  2022, para garantizar una salud excelente y ganarle la batalla al coronavirus, si fuera necesario mantenernos tranquilos y en oración permanente en nuestros hogares para evitar contagiarse.

Tenemos que imitar a Nínive la gran ciudad que tenía más de 120 mil habitantes y una gran cantidad de animales  en aquellos tiempos que nos señala la biblia, en donde nuestro Dios anuncio a través del profeta Jonás un exterminio masivo y total. La biblia dice que “todos, hasta el rey y sus grandes se mantuvieron en oración e hicieron promesas a Jehová de arrepentimiento”, y el Señor decidió no castigarlos por sus del pecados y no los destruyo como había predicado el profeta Jonas por orden suya.

El Salmo 1, en este sentido, nos habla claramente de: EL JUSTO Y LOS PECADORES:

Dice textualmente: Bienaventurado el varón que no anduvo en consejos de malos, ni estuvo en camino de pecadores. Ni en silla de escarnecedores  se ha sentado; sino que  en la ley  de Jehová  esta su delicia, y su ley medita  de día y de noche”.

Sera como árbol plantado  junto a las corrientes de agua, que da su fruto en su tiempo, y su hoja no cae; y todo lo que hace prosperara.

No así los malos, que son como el tamo  que arrebata el viento. Por tanto , no se levantaran los malos en el juicio, ni los pecadores  en la congregación de los justos , porque Jehová conoce el camino de  los justos; más la senda de los malos perecerá!!.

Ahora con rápido avance de la variante Ómicron del covid-19 entre la población dominicana mantiene con altos niveles la preocupación de todos el país, a las autoridades sanitarias, quienes ayer pusieron a todos el país  bajo alerta  epidemiológica, con mayor  énfasis en el Distrito Nacional y las provincias  de Santo Domingo y Santiago y San Cristóbal, donde están los mayores contagios, tenemos que ser mucho más prudentes y comedidos.

Recuerden, que la principal recomendación  que nuestras autoridades sanitarias  están haciendo a la población es la de no participar en actividades masivas ni sociales, que las reuniones familiares  de fin de año se hagan  solo entre vacunados; evitar el contacto cercano con personas  que estén  padeciendo afecciones  respiratorias  o proceso gripales y el uso adecuado  de mascarilla asegurándose que este bien ajustada.

Además, señalan las autoridades se debe completar  el esquema  de vacunación  de la tercera dosis, mucha higiene, acudir al médico ante los primeros síntomas  y reducir un 50 % la capacidad de personas  en estadios y lugares cerrados, y mantener el distanciamiento físico. La alerta epidemiológica ha sido emitida ayer por el  ministro de Salud Pública, el Viceministro Eladio Pérez y el director de Epidemiologia Ronald Skewes, según el comunicado.

En el nombre de Jesús, nuestro salvador, tenemos que cumplir con las presentes medidas epidemiológicas de las autoridades, es por el bien de nuestras vidas y los demás, tenemos que entender que pasamos por una dura prueba con el covid-19, y que si Dios lo ha permitido es porque necesitamos corregir las malas acciones y pedirle con lágrimas, con suspiros, como los Egipcios, el perdón de nuestros pecados.

Autor JOSÉ GUERRERO

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