He oído de labios de personas que trataron a Trujillo que el mismo tirano reconoció en varias ocasiones que este es un pueblo difícil de gobernar y de complacer.
Medalaganario, valiente, al que no se le puede ir con medias tintas y al que es harto difícil engañar.
La oposición al gobierno, la grande y hasta la de partiditos familiares cree que el pueblo no sabe y reconoce los esfuerzos y el trabajo de más de 20 horas al día del Presidente Luis Abinader.
Ha cogido el toro por los cuernos, gobierna de frente al país y escuchando al pueblo, y esa forma de dirigir y gobernar por vez primera vista , la reconoce una gran mayoría que está satisfecha, y todo el que vivió el desgobierno corrupto que entregó el país hasta sin dinero para pagar el mes de agosto, ve y siente la gran diferencia en el ejercicio del poder.
POR GERMÁN MARTÍNEZ