EL NUEVO DIARIO, CIUDAD DEL VATICANO. – El papa Francisco deseó este martes que los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022, que comenzarán el próximo viernes, sean “una experiencia única de fraternidad humana y de paz”, en un mensaje al término de la audiencia general celebrada en el aula Pablo VI del Vaticano.
“Deseo a los organizadores el mejor de los éxitos y a los atletas que den lo mejor de sí”, recordó el pontífice, subrayando cómo “el deporte, con su lenguaje universal, puede tender puentes de amistad y solidaridad entre personas y pueblos de todas las culturas y religiones”.
«Juntos es de hecho la palabra clave para interpretar este evento» y «este es el objetivo: hacer crecer un mundo más fraterno. Juntos”, reiteró el papa.
Francisco resaltó, sobre todo, la importancia de la participación en los Juegos Paralímpicos de los atletas con discapacidad y de los atletas refugiados porque son «un ejemplo para superar los prejuicios y miedos» y un estímulo «para no dejar a nadie atrás».
“El ejemplo de los atletas y atletas con discapacidad ayudará a todos a superar prejuicios y miedos y a hacer nuestras comunidades más acogedoras e inclusivas: esta es la verdadera medalla de oro”, dijo.
Mientras que sobre las atletas refugiadas animó a “que sus testimonios ayuden a animar a las sociedades civiles a abrirse a todos con una confianza cada vez mayor, sin dejar a nadie atrás”.




