Luis Abinader impulsa la transformación vial y urbana del municipio con obras que redefinen su futuro.
Durante décadas, Santo Domingo Oeste fue sinónimo de abandono en materia de infraestructura. Sus principales vías colapsaban en las horas pico, las cañadas eran fuente de enfermedades y contaminación, y el crecimiento urbano superaba la planificación. Sin embargo, desde 2020, el municipio ha comenzado a vivir una transformación palpable. Bajo la gestión del presidente Luis Abinader, el cambio ha llegado con un enfoque integral: movilidad, drenaje, vivienda y desarrollo urbano, llevando progreso a sectores que durante años esperaron soluciones reales.
En octubre de 2025, el presidente Abinader inauguró una de las soluciones viales más esperadas de los últimos 20 años: el paso a desnivel de la Prolongación 27 de Febrero con Isabel Aguiar, conocido como “Pintura”. La obra, de 480 metros lineales, beneficia directamente a más de 70,000 conductores diarios que se desplazaban por una de las intersecciones más congestionadas del país.
Además de su impacto en la movilidad, la obra forma parte de un plan maestro de transporte urbano que incluye una terminal de autobuses y la futura Línea 3 del Teleférico de Santo Domingo Oeste, lo que permitirá conectar a cientos de miles de personas con el Distrito Nacional y otras zonas metropolitanas de manera rápida y segura. El mandatario destacó que esta obra fue financiada con fondos provenientes de la renegociación del contrato con Aerodom, sin endeudamiento público, marcando un precedente en la gestión eficiente de los recursos del Estado.
La construcción del Teleférico de Santo Domingo Oeste, actualmente en marcha, busca impactar a más de 400,000 personas en sectores como Herrera, Bayona, Buenos Aires, Manoguayabo y Hato Nuevo. Su conexión con la nueva terminal interurbana en la zona de Pintura hará posible que el transporte público sea más ordenado, económico y sostenible. Este proyecto es visto como un símbolo del cambio: una obra moderna que integrará comunidades marginadas al desarrollo urbano, fomentará la reducción de emisiones y generará empleos directos e indirectos en el proceso.
Otro proyecto en curso que redefine la estructura institucional del municipio es la Ciudad Judicial de Santo Domingo Oeste, que albergará tribunales, fiscalías, defensorías públicas y oficinas administrativas del sistema de justicia. El complejo, con más de 24,000 metros cuadrados de construcción, busca acercar los servicios judiciales a miles de ciudadanos que antes debían trasladarse hasta el Distrito Nacional para realizar sus trámites. Este proyecto representa una apuesta por la descentralización y la modernización del Estado, mejorando la eficiencia en la atención al público y dignificando las condiciones laborales del personal judicial.
Uno de los mayores retos de SDO ha sido el manejo de sus cañadas. La cañada de Guajimía, por años foco de contaminación y enfermedades, está siendo intervenida en una segunda fase que completará 2.2 kilómetros de drenaje pluvial y sanitario. El objetivo es erradicar los vertederos improvisados y transformar el entorno en un espacio habitable y limpio, beneficiando a miles de familias que viven en condiciones vulnerables. Esta obra ambiental complementa la visión del gobierno de promover una ciudad más verde, segura y resiliente frente a las lluvias y el cambio climático.
El plan habitacional también ha tenido una importante presencia en Santo Domingo Oeste. A través del Ministerio de Vivienda y Edificaciones (MIVED), el gobierno ha entregado 608 apartamentos en el Proyecto Hato Nuevo IV y 140 viviendas en el Proyecto Lolita II en Ciudad Hato Nuevo, beneficiando a cientos de familias que hoy disfrutan de un techo digno, seguro y moderno. Estas acciones no solo proveen vivienda, sino que reordenan barrios enteros y fortalecen la integración social, especialmente en comunidades de bajos recursos.
Las obras impulsadas por el presidente Luis Abinader están cambiando el rostro de Santo Domingo Oeste. Calles mejoradas, soluciones viales, viviendas dignas, espacios judiciales modernos y proyectos de transporte innovadores son hoy una realidad tangible que marca el inicio de una nueva etapa para este pujante municipio.
Por Kary Ramírez Almonte
