EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- En un fraternal abrazo, se confundieron el legendario salsero cubano, Rey Ruiz; y la revelación del año en romantiqueo, el merenguero típico, El Blachy; cuando el teleproductor Iván Ruiz les propuso una fusión de islas y talento musical.
Este reventón navideño se celebró el jueves 28 de noviembre, en transmisión en vivo y vía streaming, donde miles de fanáticos disfrutaron de la llegada de Rey Ruiz al telescenario real, un artista que se caracteriza por su humildad y la calidad artística que ha mantenido por más de 30 años en el género de música tropical.
“Este estudio pocas veces ha estado así, y es el fenómeno, el Blachy”, admitió el productor general de La Telerealidad, mientras que, Gerald Ogando, con su acostumbrada jocosidad, dijo que, “nada más Jhonny Ventura ha puesto este estudio así y Fernandito Villalona”.
El artista cubano no resistió y mostró su orgullo por sus inicios inspirado en Eddy Herrera y se hizo acompañar de Iván, ambos entonaron, “Carolina”, un merengue referente en el repertorio del “Galán del Merengue”.
Además, rememoró su primera presentación en el emblemático programa de la televisión dominicana, Freddy Beras Goico, del cual conserva gratos recuerdos y una diminuta cicatriz de ese momento.
A seguidas, El Blachy, ya incorporado con sus músicos en el set de estudio provocaba euforia por su más reciente hitazo “Hola perdida”, considerado como el palo musical navideño del cantante típico, quien, en voz de Julio Clemente, anunció estar al tope de fiestas y que para televisión nacional, hasta pasado marzo del 2025, era imposible agendar presentaciones.
Fue cuando, Iván, entre chercha y relajo, le llamó primo al intérprete de “Media mitad” y “Luna Llena”, entre admiración y respeto profesado por el ingenioso conductor. El Blachy pasó al lado de Rey y entonaron, resultado de que, “esto es una telerealidad y puede pasar cualquier cosa, esto es improvisado para ustedes dos”.
El Blachy fue retado por Iván a interpretar el temazo “No me acostumbro” de Ruiz, y no pasaron cinco segundos y, el merentípico arrancó cantando y como un gesto de unión y distinción, el cibaeño le pasó su micrófono al salsero, en color rojo timbrado con su nombre y, subieron a tarima con la orquesta de El Blachy, para poner a Jaime Rincón y todo el elenco de telepanelistas, a grabar con sus celulares.
Ruiz muy delicado bailó con alguna dama en el set por su manera de amenizar y motivar a sus seguidores. Cuando Diomelo, al parecer en un instante de telepatía con la teleredactora del show, vaticinó que el intérprete de “Pero dime” grabará “No me acostumbro” en versión de acordeón y base típica. A pocos minutos, el excantante de Jovanny Polanco, adelantó que se aproxima otro home run, «palo».
De su lado, Rey Ruiz, admitió sobre Blachy que, “me parece a mí que el hombre canta muy bien, El Blachy, buen timbre de voz, afinadito”. Iván emocionado relajó con solicitar al canal dos horas, de sus acostumbrados dos minutos. El salsero valoró que la televisión dominicana sea tan dinámica y espontaneo, “al livintú, muy viva”.
Entonó El Blachy: “Hola, perdida, soy yo, el examor de tu vida, volví para volver a hacerte mía, porque un amor así no se olvida”, a ritmo de salsa y agradar al salsero, quien, en sus inicios, migró de Cuba hacia Santo Domingo y empezó un camino de enfoque y trabajo, que le permitió colocarse en el sitial de la salsa y, en la actualidad, sus canciones, no perimen.
Fue soprendido en una conexión especial con sus padres, e Iván aprovechó para que su papá lo presentará como un locutor profesional. Un momento cargado de muchas emociones y recuerdos indelebles.
Rey Ruiz se presenta este sábado 30 de noviembre en el salón La Fiesta, del Hotel Jaragua, a partir de las 9:00 de la noche, quien complació a los presentes con fotografías y autógrafos.
Los dos Ruiz recomendaron a El Blachy, quien ha pegado “Sobrio” y “No te contaron mal”, seguir cultivando su talento, “no necesitas ser humilde, lo que necesitas es talento”, de una manera muy auténtica y modesta, sostuvo el intérprete de “Amiga” y “Piano”.
Los pies de los telereales zapatearon por una hora repleta de buena música, que encendió el ambiente navideño, al estilo de La Telerealidad.
¡Esta es La Telerealidad, sin guión, un desórden organizado, es la novedosa televisión improvisada!
