Hemos tenido la mala suerte en los últimos cinco años de padecer de catástrofes que han quitado la vida a personas valiosas en distintos puntos del país, aunque el Distrito Nacional ha sido el más desfavorecido.
Centro Comercial en San Cristóbal, Centro Comercial en Santo Domingo, la pared en la intersección Máximo Gómez con 27 de febrero, túnel de la 27 de febrero y ahora, la discoteca del Jet Set.
En todos estos casos, no se trata de la ocurrencia de un gran temblor de tierra, aunque nadie puede descartar, que con la cantidad de sismos que se registran en el país, pueda verificarse un debilitamiento de estructuras en uso. Sin embargo, hemos visto el derrumbe de techos y paredes, con las consecuentes tragedias involucradas.
Pensar en medidas como las que siempre se recomiendan, que hacer, durante y después de un sismo, o que hacer antes, durante y después de una tormenta tropical o un huracán, no es suficiente. Lo visto con la pared que aplastó varios vehículos en la 27 de Febrero con Máximo Gómez, solo por la gran cantidad de lluvia de ese fatídico noviembre, pone en tela de juicio la construcción de múltiples elevados en esa misma avenida 27 de febrero y otros lugares del país.
No olvidemos que nuestro país es parte de una isla, amenazada por una falla tectónica, siempre mencionada por los expertos en geología, y siempre se han dado recomendaciones para que la gente sepa cómo actuar ante un sismo de importante magnitud.
En algunos momentos se ha querido aprovechar el tema, para ofrecer la idea de proyectos que buscan reforzar las construcciones hechas en el país y además incluir en la aprobación de planos para nuevas construcciones, la inclusión de previsiones anti sísmicas en las mismas.
Algunas personas al comentar sobre el impacto continuo de vibraciones por el alto sonido de las discotecas, plantean como una causa potencial del derrumbe del techo de Jet Set precisamente por ese impacto sónico continuo, pero a la vez, llama la atención a los demás centros nocturnos cerrados, para la realización de previsiones sobre potenciales situaciones parecidas.
Las causas reales de este evento trágico, aun no ha sido dada, y como siempre, ojalá que la información sea la correcta y sea dada de manera oportuna y sin fines de sacar capital político.
Tras 12 horas continuas de búsqueda y el reporte del medio día, ya se habla de 29 personas fallecidas, en un ambiente de casa llena, en la discoteca Jet Set.
Pero también, queda una interrogante importante, sobre la calidad de las construcciones que viene realizándose en el país. Ahí compartimos eventos que en los últimos años llevaron consternación y luto a la familia dominicana y dejan muchas preguntas aun sin contestar.
¿Cómo puede caerse una pared en el elevado de la 27 de febrero con Máximo Gómez?. ¿Por qué puede derrumbarse parte del techo del túnel de la 27?. ¿Por qué ocurrió el derrumbe en la plaza comercial en San Cristóbal? ¿Por qué ocurre el accidente en la plaza comercial donde un vehículo cae al vacío desde los parqueos? ¿Por qué se derrumbó el techo de la discoteca Jet Set?
Estos eventos deben llamar la atención a la calidad de las construcciones que estamos teniendo en el país. Y sobre todo, los niveles adecuados de supervisión de los mismos. Buscar economía en el ahorro de materiales, casi siempre, trae como consecuencia una merma en la calidad de la construcción que puede favorecer filtraciones, vicios de construcción y riesgos innecesarios a la vida de las personas.
Por: Julián Padilla.