EL NUEVO DARIO, SANTO DOMINGO.– El Banco Central de la República Dominicana (BCRD), proclamó que como institución monetaria está preparada para reaccionar cuando las condiciones lo ameriten para proteger la estabilidad macroeconómica y mantener el funcionamiento de los sistemas financieros y de pagos.
La entidad sostiene que continuará observando de cerca el fenómeno de la inflación global, y que a la vez se mantendrá vigilante ante las condiciones económicas, tanto domésticas como internacionales, mientras perdure la crisis del Coronavirus.
Según un análisis de “Inflación Mundial: Efecto en los Países y Reacción de los Bancos Centrales” del Departamento Internacional y Asesoría de la Gobernación del BCRD, la crisis global provocada por la pandemia de la COVID-19 y su repercusión en las economías del mundo, llevó a los gobiernos y a los bancos centrales de la mayoría de los países a adoptar políticas expansivas para proteger la salud de la población, reactivar la economía y moderar el impacto en el ingreso y el empleo de los sectores más vulnerables de la sociedad.
El documento sostiene que estas políticas crearon las condiciones para la reapertura de las economías, iniciándose un proceso sostenido de reactivación en varios países.
No obstante, refiere que la reactivación económica ha sido impulsada por una rápida recuperación de la demanda mundial en un entorno de oferta global limitado por la interrupción en la cadena de suministros y por aumentos sostenidos en los precios de las materias primas y del transporte de mercancías.
Refiere que este desfase entre la oferta de productos y la demanda ha generado una alta inflación de carácter global que se ha transmitido a una gran parte de las economías.
Subraya que en el caso de algunas economías emergentes como la República Dominicana, la inflación doméstica se ha visto afectada por el alza de precios de algunos insumos muy utilizados en la producción local, como el petróleo, el maíz, el trigo y la soya, a la vez que las empresas han confrontado altos costos de fletes y seguros en un mercado donde el costo promedio mundial de transportar un contenedor se ha incrementado de unos USD 2 mil (dólar estadounidense) antes de la pandemia, a más de USD 10 mil en la actualidad.
Refiere que la reacción oportuna de política frente a la pandemia, la efectiva gestión de la crisis de salud y los fuertes fundamentos macroeconómicos de RD, han sido elementos fundamentales para una expansión del producto real que se espera podría ubicarse en torno a 10.7 % al cierre del presente año.
Puntualiza que este crecimiento continuaría en 2022 por encima del potencial, tomando en consideración la reapertura de las actividades económicas y el repunte del turismo, así como el avance obtenido en el proceso de vacunación.




