EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- El economista Jaime Aristy Escuder deseó este martes que ojalá pueda llover pronto en el país, ya que la sequía que ha empezado a disminuir las reservas de agua en los embalses de las represas puede generar una caída significativa de la producción agrícola, lo que causará inmediatamente un desequilibrio entre la oferta y la demanda de productos agropecuarios y generará un aumentos de precios.
En tal sentido, el economista llamó a las autoridades hacer hasta lo «indecible» para que en este periodo de sequía puedan hacer una buena gestión del agua y, de esa forma, lograr que aumente la producción agropecuaria.
“Si nos vamos a ver lo que ha sido la inflación en los últimos meses se van a dar cuenta que una parte significativa de esa variación de precios se explica por el aumento de precios de productos agropecuarios, entonces yo creo que es fundamental que las autoridades hagan lo indecible para poder hacer una buena gestión del agua”, expresó.
Aristy Escuder emitió sus comentarios al ser entrevistado por los periodistas Enrique Mota, Rafael Zapata, Julia Muñiz y Glenn Davis Felipe, en el programa “El Nuevo Diario AM”, transmitido por la plataforma digital El Nuevo Diario TV.
(Ver programa).
Añadió que las actuales autoridades están haciendo todo lo posible para lograr un aumento de la producción agropecuaria, sin embargo, considera que deben hacer muchísimo más porque de lo contrario, se verán más aumentos de precios en los próximos meses.
Aumento de salario
El economista sostuvo que el aumento salarial de un 19.6 % para los empleados del sector privado no sectorizado, aprobado por el Consejo Nacional de Salarios (CNS), representará un incremento de costos que si no es compensado con un incremento de productividad, se traducirá en un empuje hacia arriba de los precios.
“Cuando la empresa dice bueno, no me aumento la productividad, tengo que incrementar estos costos, pues lo que voy a hacer es incrementar los precios, si logro hacer eso significa que hay un aumento de la tasa de inflación”, acotó.
Continuó explicando que un aumento en la tasa de inflación implica un mayor esfuerzo por parte de las autoridades monetarias del país para controlar este fenómeno con un incremento de la tasa de interés por encima del que hubiese existido, sino se hubiera registrado el aumento de salario en esa magnitud.
“El resultado final siempre va a ser una reducción del nivel de empleo o un aumento del nivel de precios, eso es algo que hay que tomarlo siempre en consideración a la hora de tú definir lo que va a ser tu política de rentas o tus políticas de salarios mínimos”, sostuvo.
En tal sentido, dijo que lo mejor habría sido, en lugar de venir con un ajuste de esa magnitud, que el aumento se de en un rango entre 10 y 16 % para que no haya repercusiones sobre los precios.




