Los observatorios del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial pronostican una situación catastrófica para la economía mundial cara al 2023.
Una recesión en la economía mundial en el 2023 sería una hecatombe.
La pandemia del Coronavirus provocó una recesión de la economía mundial en el 2020.
La economía mundial no se ha repuesto totalmente de los efectos de la recesión de 2020.
Para enfrentar la pandemia los países del mundo cerraron parcialmente sus economías al cerrar sus fronteras.
Ahora la recesión no vendrá como consecuencia del cierre parcial o total de las fronteras de las naciones.
En la base de la recesión del 2023 estarán bases económicas, unas creadas por los gobiernos, y otras creadas por la dinámica de la misma economía.
La política monetaria aplicada por los países desarrollados están alentando la recesión, puesto que la subida constante de la tasa de interés de política monetaria al subir las tasas de interés pasivas y las activas al mismo tiempo, la subida de las activas ha encarecido el crédito y eso ha estado limitando la expansión de la producción y, por ende, la expansión o el crecimiento de la producción.
Los bancos centrales mediante la aplicación de políticas monetarias restrictivas han recogido el exceso de liquidez, han afectado positivamente la inflación, pero han creado tendencias negativas por el lado del crédito vía el aumento de las tasas de interés activas, lo que limita el crecimiento o expansión de la producción de bienes y servivicios.
Ese es el caso de la economía de Estados Unidos y el caso de las economías de la Unión Europea incluyendo a Gran Bretaña.
La economía de China Popular ha estado decreciendo.
Una situación de decrecimiento de la economía de los países desarrollados, de China Popular contrae la demanda mundial de productos de toda naturaleza.
Pero también se ha estado contrayendo y seguirá contrayéndose la economía de los países subdesarrollados.
En América Latina solo crecerán Panamá (7%) y República Dominicana (5.4%).
Todo eso significa que el desempleo, la pobreza extrema, la pobreza en general y la desigualdad social crecerán estrepitosamente.
Una crisis generada en el mismo centro de los países desarrollados y de China Continental, que son el centro de la dinámica mundial, generará una crisis recesiva que no tiene precedentes inmediatos en la economía mundial.
Hasta los países subdesarrollados que crecerán en el 2022 serán afectados por la gran recesión económica que se desarrollará a nivel mundial en el 2023.
El mundo exige que Rusia termine la guerra que inició en Ucrania hace casi un año.
Hay que enfrentar la crisis del petróleo y del gas natural.
Los organismos de cooperación multilateral deben flexibilizar sus carteras de crédito a favor de los países subdesarrollados y las deudas de éstos con ellos.
POR EL DR. VÍCTOR MANUEL PEÑA
*El autor es doctor en Economía, abogado y miembro de la Dirección Central de la Fuerza del Pueblo.