República Dominicana parece tener más potencialidades de las que nosotros mismos podemos apreciar. Así es en múltiples sectores y quizás esto explica esa sensación de pesimismo, muy frecuente en las expresiones manifiestas de auto atribuirnos incapacidades.
Siempre asumimos que vivimos en el peor mundo y que por lo regular no somos capaces de superar nuestras realidades. Desde fuera nos miran con mejores ojos y donde vemos dificultades otros ven oportunidades.
Es una actitud atribuible a nivel general. Somos muy prestos a ser quejosos, pero nada dispuestos a cumplir reglas.
Tal vez una razón que contribuya a esa postura sea el hecho de que casi todo lo vemos a medio talle y eso da esa sensación.