Los últimos hechos criminales que se vienen produciendo en el país, están demostrando claramente que el Gobierno no tiene un plan de estrategia efectivo para combatir la delincuencia.
Claro, que hay que tomar en cuenta, los difícil y complicada que se ha presentado la agenda del presidente de la Republica, licenciado Danilo Medina, con el caso de corrupción de la empresa Odebrecht, que envuelve a funcionarios de los últimos tres gobernantes que ha tenido el país del 2001 a la fecha.
Aun así, la delincuencia nos arropa y cada día pone más en peligro nuestras vidas, por lo que hay que tomar medidas contundentes, rápidas, serias e inteligentes lo más pronto posible, en vez de andar con titubeos.
En tanto, parece mentira, la situación agrava, muchos ancianos, mujeres y niños, han tenido que ser más cautelosos al transitar por nuestras calles; ponerse en las manos de Dios y estar seguro de que cuando tu necesita la protección de un Policía, no aparece ni por los santos espiritista.
Los últimos hechos están evidenciando claramente que al Gobierno del presidente Danilo Medina, se le ha hecho imposible tomar un control efectivo sobre la delincuencia que nos arropa a todos los niveles, y que pone en peligro la vida de todos y cada uno de los ciudadanos en los actuales momentos, debido a la enorme cantidad de robos, atracos, crímenes, asesinatos. Violaciones de menores, secuestros y todos los delitos del mundo, bajo la indiferencia de las autoridades.
Para darle una idea mínimamente de lo difícil y complicada que esta la situación, le voy a leer algunos titulares de los diferentes medios: Ladrones no dan tregua a residentes cerca casa de Danilo; delincuencia azota poblados del sur; desconocidos a bordo de una motocicleta dispararon contra la esposa de un diacono provocándole la muerte. Presidencia y Policía confirman muerte de exmilitar. Policía mata dos presuntos delincuentes en Bonao, y un rosario de hechos delictivos que asombran, asustan y consternan a la ciudadanía.
Se recuerda que esta dramática situación se viene reflejando en los gobiernos del presidente Danilo Medina desde los años 2013-2014, cuando un estudio de “percepción de inseguridad de la región”, de acurdo a un diagnostico presentado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y que examino la seguridad ciudadana, coloco a la Republica Dominicana con el indisis mas alto de inseguridad ciudadana, seguida de Venezuela entre 18 países.
El drama es más sombrío, debido a las medidas erradas y desordenadas que vienen tomando las autoridades para combatir la delincuencia, en una sociedad podrida de los pies a la cabeza, cuyo mal se encuentra en raizado en los propios estamentos del estado y en las instituciones públicas del gobierno.
Otro estilo del Gobierno ha sido, fomentar el crecimiento de los juegos de azar, anteriormente prohibidos y limitados, a tal punto que los barrios de las principales ciudades están repletos de bancas de juegos, cuyo funcionamiento se permitía anteriormente en lugares limitados con la exclusiva intención de que se le proporcionara ayuda económica a instituciones benéficas como lo hacía el Padre Billiny.
En la actualidad todos los juegos están concentrados en los barrios pobres y miserables de la nación. Loterías, extranjeras por pipa; nacionales, maquinitas tragamonedas, lotos, bingos y más de dos millones bancas. Las armas de fuego traídas por personas importantes de contrabando, que sin ningún registro están llenando todo el país. Las drogas y el crimen organizado, entre otros males.
Otro caso que saca que contesto la lucha de los patriotas, Duarte, Sánchez, Mella, Luperón y los que participamos de la revolución de abril del 1965, ha sido el hecho de que los 2 millones de haitianos que tenemos en la media Isla, durante este último gobierno están recuperando el suelo perdido y ya ocuparon nuevamente la Republica Dominicana, esta vez pacíficamente y con la ayuda de la comunidad internacional.