EL NUEVO DIARIO, PITTSBURGH – La temporada de altibajos de Edinson Vólquez ha dado otra vuelta, algo difícil de entender. El dominicano de 33 años tiene una teoría para explicar el dominio que ha exhibido últimamente: un tobillo adolorido.
No es broma. Vólquez ha convertido algo negativo en un elemento positivo, afirmando que la lesión que sufrió en el primer inning de su juego sin hit ni carrera el sábado pasado contra los Diamondbacks ha mejorado su actuación en el montículo. El jueves, el derecho dominó por completo a los Piratas en el PNC Park, ayudando a Miami a derrotar a Pittsburgh por 7-1.
Vólquez tiró 7.0 ceros, permitiendo tres hits y ponchando a ocho bateadores.
«Es una locura, pero lo del tobillo me mantiene bajo control», dijo Vólquez. «No trato de hacer demasiado. Es algo con mi mecánica. Antes, como que saltaba hacia el plato. Me tengo que mantener para atrás para asegurarme de estar bien del tobillo, para soportar mi peso. Me mantiene bajo control más».
Vólquez le tiró un no-hitter a Arizona el sábado pasado, sacando los últimos 26 outs con dolores en el tobillo derecho. En la primera jugada de dicho partido, el dominicano chocó con el boricua Reymond Fuentes y se torció el tobillo al completar un out en la primera base.
Hubo interrogantes acerca de siguiente salida de Vólquez, pero el quisqueyano dijo presente el jueves y volvió a brillar.
«Creo que estuve mejor (el jueves)», afirmó el lanzador. «Creo que tiré más strikes que la última vez con mi pitcheo rompiente. Estuvo bien mi comando de la recta después del primer inning. Di dos bases. Pude hacer buenos pitcheos cuando tenía que hacerlo».
Para Vólquez, el repunte ha sido impresionante si se toma en cuenta que el diestro empezó la campaña perdiendo sus primeras siete decisiones. Pero ha ganado sus últimas tres aperturas de manera dominante.
Desde que derrotó a los Filis el 29 de mayo, Vólquez ha permitido una sola carrera en 22.0 entradas (efectividad de 0.41) al conceder seis hits y ponchar a 22 bateadores.
En sus últimas dos presentaciones, Vólquez ha permitido tres hits al tirar 16.0 ceros, con 18 ponches.
Ahora mismo, Vólquez se ve bien suelto y se está divirtiendo. En tono de broma, expresó que hará lo que sea necesario para seguir por el camino positivo.
«Entonces, cuando me recupere del tobillo, voy a darme un batazo ahí», dijo con una risa.
