EL NUEVO DIARIO, NUEVA YORK._ Johnny Díaz, un policía dominicano del Departamento de Policía (NYPD) y asignado al cuartel 34 en el Alto Manhattan, que fue arrestado el lunes con la masa en las manos, cuando tenía consigo una importante cantidad de cocaína, y acusado de tráfico de drogas y exigirles sobornos a los narcotraficantes que arrestaba, se declaró inocente ayer martes en la Corte Suprema Estatal de Manhattan, rechazando las acusaciones.
Los fiscales dicen que Díaz, de 48 años de edad, le dijo a un encubierto con el que negociaba que él era un policía y que debería saberlo bien, creyendo que se trataba de un civil que también estaba en el negocio sucio.
El policía deshonrado veterano de 23 años de la fuerza, fue inicialmente investigado por supuestamente ofrecer ayuda a los narcos a cambio de dinero en efectivo.
Los fiscales dijeron que un investigador encubierto fue asignado para rastrear a Díaz y se hizo pasar por un traficante de drogas en su área de patrulla.
Díaz, arrestó al informante el 23 de mayo y presuntamente registró solo $ 17,000 de los $18,000 en efectivo que le confiscó al detenido.
Luego se ofreció a devolver el teléfono celular del distribuidor de un armario de pruebas y aceptó una botella de $250 de whisky Johnnie Walker Blue como un regalo de agradecimiento por el favor, dijo la fiscal adjunta Emily Farber en la corte.
El policía corrupto supuestamente ofreció manipular el caso pendiente del hombre para que lo soltaran a cambio de $20,000.
Díaz, padre de dos hijos, también ayudó a transportar un kilo de cocaína del Bronx al Alto Manhattan para el informante el 15 de junio a cambio de $4,000, dijeron las autoridades.
Después de mover la carga, los dos hombres se divirtieron en un club del bajo Manhattan, donde Díaz hizo su admisión condenatoria, y le dijo al encubierto que si era descubierto, podría ser condenado hasta cadena perpetua.
Se declaró inocente de un cargo de posesión en primer grado de una sustancia controlada.
Farber dijo que se prevén más cargos y que Díaz cometió otros crímenes durante su carrera corrupta en la aplicación de la ley, incluido el robo de efectivo de los acusados y la aceptación de sobornos para obviar sus casos criminales.
El abogado de la defensa, Raymond Loving, argumentó que Díaz tenía lazos profundos en la comunidad y que no era un riesgo de fuga. Pero el juez James Burke le negó la fianza.
«Como se alega en este caso, este oficial estaba dispuesto a traficar narcóticos peligrosos en la ciudad que ha jurado proteger por unos pocos miles de dólares, y a robar evidencia de su propio cuartel por una botella de whisky escocés», dijo el Fiscal de Manhattan Cyrus Vance Junior en una declaración.
Díaz enfrenta hasta 40 años de prisión si es declarado culpable.
