EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- El reverendo padre Domingo Legua, vicario de la pastoral social de la Arquidiócesis de Santo Domingo, aprovechó este viernes el sermón de las siete palabras y reprochó a los servidores públicos enrostrándoles que “nunca están donde deben estar”.
El sacerdote tuvo a su cargo el discurso de la última y séptima palabra que pronunció Jesús antes de morir y allí manifestó que hacer una diligencia en favor de un ciudadano, constituye una “pérdida de tiempo y energía” para los servidores públicos, un aspecto que calificó como “grave”.
“Aquí no es”, “vaya a otra oficina”, “venga más tarde”, “se cayó el sistema” y “vuelva mañana”, son algunas de las excusas que, según Legua, utilizan los trabajadores de instituciones públicas para negar el servicio a los pobladores dominicanos.
“¡Que grave es no saber estar donde a uno le corresponde estar!”, exclamó el sacerdote en su discurso al criticar el accionar de los servidores públicos mientras hacía una comparación de la desaparición de Jesús cuando era niño mientras María y José lo buscaban con afán.
En ese sentido, Legua dijo que en la actualidad también hay muchas personas que se pierden, como padres de familia, sacerdotes, políticos, empresarios e industriales, pero reconoció que lo importante es volver a encontrarse en el punto inicial.
