EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- La renuncia del veterano locutor y versado comunicador Héctor Olivo como secretario de Comunicaciones del Partido de la Liberación Dominicana, es el estallido de una crisis que se viene generando desde el mismo día en que Charlie Mariotti asumió como secretario general de esa organización política.
Antes no trascendía a nivel de los medios de comunicación, pero el “grito” de desesperación del personal que labora en la Casa Nacional del PLD era un secreto a voces, y en ese tenor son múltiples e interminables sus quejas por el trato que afirman reciben del exsenador de la provincia de Monte Plata.
Aunque hasta ahora no se habían hecho públicas son conocidas las lamentaciones de los empleados de la sede del partido morado, por las limitaciones que confrontan porque allí “hace falta de todo”.
Y las querellas no se detienen. Aseguran que este secretario general del PLD quiere manejar ese partido como si se tratara de un “ente privado”, con reglas gerenciales y de proceso, desconociendo que se trata de una organización política con características propias.
El disgusto lo encarna Héctor Olivo, que lo hace público con su dimisión, pero igual lo sufren todos los empleados de la Casa Nacional, así como otros titulares de secretarías del partido que fundó el extinto profesor Juan Bosch.
El cambio ha sido brusco e impetuoso en el estilo de dirección y mando, contrastando como el “cielo a la tierra” cuando se compara con la gestión de quien lo precedió en el cargo, Reinaldo Pared Pérez, de quien se dice siempre dispensó respeto y un trato afable a todos sus compañeros que están de servicio en la Casa Nacional.
“Con Reinaldo la cuestión era totalmente diferente a lo de ahora, cuando todo es por recado, memorándum y papelitos”, dijo a El Nuevo Diario una fuente de muy buen crédito que prefirió conservar el anonimato porque dijo temía a represalia por parte del “nuevo jefe” en la secretaría general del PLD.
Se sabe que el PLD, históricamente, guarda una larga tradición de respeto a sus fundadores y dirigentes de larga datas, que sin duda y a todas luces esta nueva generación no entiende.
Y, si bien la parte joven ofrece nuevas perspectivas y ámbitos diferentes, también es cierto que se tiene que contar con la experiencia acumulada.
Por su situación actual, fragmentado con la renuncia del expresidente Leonel Fernández, y la fuga de dirigentes que le han seguido hacia la Fuerza del Pueblo, lo que menos necesita el PLD es el desasosiego interno que ha creado con su llegada Charlie Mariotti al importante cargo dirigencial.
Zarandeado, además, por una serie de acusaciones contra exfuncionarios, que sin duda mellan la imagen del partido, lo que menos necesita ahora el PLD es una nueva confrontación interna, y más que eso debe de apuntar hacia la conciliación, quebrada con la partida de Leonel y su grupo
CP-PLD podría tratar caso Héctor Olivo
El tema de Héctor Olivo pudiera tener solución, de acuerdo a la consideración de algunos miembros del Comité Político (CP) del PLD consultados por este periódico.
Este jueves el CP se reúne y como puntos principales de agenda tiene para tratar el recurso por ante la Suprema Corte de Justicia (SCJ) que someterá el PLD contra la decisión del Tribunal Superior Administrativo (TSA) que declara partido mayoritario a la Fuerza del Pueblo, que lidera Leone Fernández.
Pero conjuntamente, se espera que el Comité Político también tratará la renuncia de Héctor Olivo con el interés de buscarle un entendido a la situación y persuadir al comunicador a dar marcha atrás.
