EL NUEVO DIARIO, TUNEZ.- Reino Unido abrió este lunes su embajada en la capital libia, Trípoli, ocho años después de haber abandonado el país cuando en 2014 estalló la guerra civil que segó la vida de más de 10,000 personas, causando miles de heridos y desplazados y sumiendo al país en una espiral de violencia.
«Un paso importante en una relación vibrante y duradera, a pesar de los desafíos en el camino la relación ha resistido la prueba del tiempo», anunció la embajada en su página Twitter junto a una fotografía de la reina Isabel II (que celebró este jueves el septuagésimo aniversario de su ascenso al trono) y el rey Idris I de Libia en su visita a Tobruk (este) en 1954.
Una semana antes, el primer ministro paralelo libio, Fathi Bashaga, intentó escenificar en la ciudad de Sirte la autoridad de su Ejecutivo junto a Aqila Saleh, presidente del Parlamento, en Toburk, que lo designó en febrero pasado para remplazar al poder de Trípoli, el Gobierno de Unidad Nacional (GUN), liderado por Abdulhamid Dbeiba.
Bashaga no ha conseguido hacer su poder efectivo hasta ahora en la capital, ni tampoco ser reconocido internacionalmente, pero su sectorial apoyo ha devuelto al país a una dualidad administrativa con dos Ejecutivos que han vuelto a dividir el país.
Debido a una disputa sobre las leyes que regulan las elecciones, los comicios legislativos y presidenciales previstos el pasado 24 de diciembre fueron aplazados por decisión de la Comisión Electoral a tan sólo 48 horas del escrutinio.
