El fin de semana pasado, específicamente los días 11 y 12 del presente mes, la Red de agencias de desarrollo Económico Locales, Adeldom y la Agencia de desarrollo Económico Local de Bahoruco, ambas presididas por quien suscribe, organizaron un curso taller sobre Asociatividad Empresarial y Encadenamiento Productivo, en el que participaron más de treinta ciudadanos de ambos sexos, a los cuales se le vio el interés en el tema y su gran aprovechamiento, interviniendo con gran nivel, a cada tema planteado por la inteligente y capaz disertadora, la experta en el tema, Diana Patricia Borrero Román, quien dejó entrever claramente su aprobación.
La Asociatividad Empresarial vista en perspectiva para el Desarrollo económico Local, no tuvo desperdicios, escogiéndose ejemplos prácticos para su entendimiento, así como el encadenamiento productivo, siendo identificadas buena parte de productos locales y sus extensas cadenas de valores, así como potencialidades a tomar en cuenta para la consecución del Desarrollo económico local.
LA Red Adeldom pretende promover estas capacitaciones en todo el territorio nacional, como lo desea, según discurso en nuestra juramentación de Miguel Ceara, ministro de Economía, Planificación y Desarrollo , al externar su deseo de que la formación de las Agencias de Desarrollo Económico Local, llegue a todas las provincias dominicanas; recordemos que en la actualidad existen 7 para la misma cantidad de provincias, citamos: Adelbaho (Bahoruco), Adelmopla (Monte Plata), Adelva (Mao Valverde), Adetda (Dajabón), Adetsara (Sánchez Ramírez), Adet-Seibo), y la más reciente en fundación, la Adelsar(Santiago Rodríguez).
La promoción de enlaces territoriales de esta disciplina, más el gestionamiento de iniciativas que generen conocimiento para permitir actuar y compartir en un mundo globalizado, es nuestro norte. Es objetivo nuestro de favorecer alianzas público-privadas que contribuyan con el desarrollo territorial.
Podemos exclamar, a todo pulmón que no hay desarrollo nacional, si desde los territorios no se induce lo propio,.
POR JOSÉ ANTONIO MATOS PEÑA